Aitor Elizegi es el sorprendente sucesor de Josu Urrutia como presidente del Athletic Club tras imponerse a Alberto Uribe-Echevarría en una campaña electoral finalizada este jueves con el día de las votaciones y que el cocinero de Santutxu comenzó con dudas.
Elizegi anunció que se presentaba a los comicios cuando ya casi nadie esperaba contienda electoral, renunció a ello al día siguiente y volvió a embarcarse en la aventura 48 horas después. Una aventura en la que tuvo sus traspiés y sus más y sus menos con su rival, pero de la que fue saliendo fortalecido a medida que iba transcurriendo la campaña y se iba haciendo cada vez más presente y Uribe-Echevarría más ausente.
Al también presidente de Bilbao Dendak, le dieron el último empujón los nombres que salió a la palestra como compañeros de viajes. Especialmente el de Rafa Alkorta como director deportivo, pero también el de Juan Carlos Ercoreca, exvicepresidente entre 2005 y 2007, quien liderará la Fundación Athletic. Otros dos exleones, Andoni Ayarza y Gontzal Suanzes, serán los principales hombres de confianza de Alkorta y Ercoreca, respectivamente.
Antes de ese ordago final, también sorprendente sin respuesta de un Uribe-Echevarría que no puso ningún nombre sobre el tapete, Elizegi ya había superado con holgura el obstáculo para ser candidato. La pista que ya avisó que lo suyo iba en serio.
El empresario bilbaíno superó con bastante menos dificultades de las previstas y en un tiempo récord de una semana el filtro de los avales de al menos del 5 por ciento de los socios con derecho a voto (un mínimo de 2.069), un trámite considerado como las 'primarias' en las elecciones del Athletic. Ahí ya demostró, presentando un 50 por ciento más de los avales que necesitaba, el músculo que 20 días después le llevó al sillón del Palacio de Ibaigane.
Hasta entonces, Elizegi no había ni desvelado ni sus compañeros. Aunque sí había dejado claro que el ámbito de la entidad que más le preocupa es el "social" y anunció que, de las seis comisiones que crearía en caso de ser presidente, él presidiría la de esa materia.
Ahora, el nuevo presidente tendrá que hacer frente a unos de los que parecía su gran hándicap, el de avalar el 15 por ciento del presupuesto de esta temporada que exige la Ley del Deporte de tener que avalar. Que, como es de 128,9 millones de euros, sería de unos 19,3 millones. Y habrá que ver como queda el asunto económico, ya que, según ha defendió Uribe-Echevarría toda la campaña, solo podrá utilizar 76 millones de los 300 en los que la gestión de Urrutia aumentó el patrimonio de la entidad.
Pero eso será a partir de un 28 de diciembre en el que la noticia es que un cocinero, que además partía como 'outsider' ante un rival continuista de una gestión con éxitos indudables, es el nuevo presidente del Athletic.