Cuando Esperanza Aguirre quiso echar al Athletic de la Copa
Dentro del capítulo de 'Historias zurigorris' que repasamos este verano, encontramos un foco realmente tenso como fue el de las sucesivas pitadas en las finales de Copa entre Athletic Club y FC Barcelona. Para añadir un poco de leña al fuego saltaba a la palestra una habitual de las batallas dialécticas más mediáticas.
Nada menos que... La presidenta del PP de Madrid y candidata al Ayuntamiento de esa ciudad, Esperanza Aguirre. Quien llegaba a pedir al Athletic Club y al FC Barcelona "abstenerse de competir en el Campeonato de España" (sic). En referencia a la final de la Copa de Rey que debían disputar el 30 de mayo en una sede que entonces estaba por definir.
Finalmente, se disputó el 30 de mayo de 2015 en el Camp Nou de Barcelona. Una decisión que sentó como un tiro a los athleticzales. Ya que los leones tuvieron que ir a jugar al feudo de Leo Messi y cía., y los aficionados dejarse una millonada en la ciudad del rival.
En el diario El Mundo, Aguirre comentaba, se ve que con dolor, que "otra vez llegan estos clubes a la final. Y otra vez ya se anuncia que las aficiones van a aprovechar la final de Copa para mostrar ese odio a los demás silbando el Himno Nacional y abucheando a S.M. el Rey". Eso escribió la política.
Quien, en su línea, no se cortaba en su texto ni con un hacha afilada. "Han aprovechado la lógica solemnidad del acto para dar una exhibición de odio al resto de españoles", escribía.
Para Esperanza Aguirre el que "desprecia al conjunto de los ciudadanos que formamos la Nación española, tiene poco sentido que se presente a una competición cuyo premio es, precisamente, el reconocimiento que le queremos tributar los ciudadanos", manifestaba en su columna.
Aguirre además añadía que "el resto de los españoles no tenemos por qué aguantar esas ofensas", y ya puestos, hasta pedía seguir el ejemplo de la medida tomada por el ya expresidente francés Nicolas Sarkozy. Cuando, ante los silbidos a 'la Marsellesa', abogó por suspender el encuentro y jugarlo días después a puerta cerrada.