Vivian levanta el pie por precaución

Dani Vivian ha vivido una trayectoria fulgurante en el mundo del fútbol. En solo tres años pasó del Ariznabarra al Athletic Club. Fue precisamente Gaizka Garitano quién lo reclutó para el filial rojiblanco cuando el zaguero apenas tenía 18 años. Ahora está a la espera de encontrar su hueco, alternando su trabajo con el del filial de Joseba Etxeberria.

Este martes se le ha visto corretear aparte en otro campo en las instalaciones de Lezama. Dato que zanjaba las dudas creadas por su ausencia en los dos últimos choques de los cachorros ante el Tudelano y el CA Osasuna Promesas. El defensa alavés sufre unas pequeñas molestias musculares y se ha preferido parar un poco para evitar que puedan ir a mayores.

Vivian es la cuarta baza en la zona de centrales, posición en la que la competencia es atroz con la presencia de tres jugadores que ya saben lo que es ser internacional absoluto con España, como son Iñigo Martínez, Unai Núñez y Yeray Álvarez. Tiene difícil rascar minutos en la primera plantilla.

Alumno de Ibai Gómez

El vitoriano ficho por el Santutxu en su primer año de juvenil y allí se encontró con el que sería su compañero en el futuro. Se trata de Ibai Gómez, que por aquel entonces entrenaba a uno de los juveniles del club. Las enseñanzas de Ibai, sumadas al talento del jugador, dieron sus frutos cuando tras solo un año en Mallona dio el salto a Lezama. Su progresión en el equipo del barrio bilbaíno fue espectacular.

A la edad de 17 le tocó curtirse en Tercera con el Basconia y no se arrugó en absoluto. Disputó 30 encuentros de liga, labrándose un nombre partido a partido en las categorías inferiores del Athletic. Cuando pasó al Bilbao Athletic, solo necesitó tres jornadas para que Ziganda le llamara para participar en una sesión del primer equipo.

Aún así, su primer curso en el filial no fue del todo bien. Apenas jugó en cuatro ocasiones con el filial, quedándose fuera de gran parte de la temporada por una fuerte lesión en el tobillo. Sin embargo, en esta pasada temporada se ha afincado como uno de los pilares en defensa del conjunto primero de Garitano y luego de Solabarrieta.

Fue entonces cuando el 11 de febrero se dio una extraña circunstancia. Garitano organizó un partidillo con los suplentes y no convocados frente al Bilbao Athletic. En él, alumno y maestro se vieron las caras. Vivian tuvo que defender al que fuera su entrenador en el pasado, Ibai Gómez. Este acontecimiento le hizo especial ilusión al extremo por ver como había llegado tan lejos un jugador formado por él.

Esta circunstancia se repitió un par de veces más antes del final de temporada, dado que Vivian subió a entrenar durante algunos periodos de tiempo. Ahora, se ha hecho con el papel de cuarto central, aunque seguirá participando con el filial. Una carrera meteórica que le ha permitido pasar de la nada a la élite.

¡Imagínate la ilusión que me hace a mi! 🙈
🔴⚪️💪🏼 https://t.co/aMY0qXqPeO

— IBAI GÓMEZ (@ibaigomez) February 11, 2019