Un parón, este preasamblea, ahora más jorobado
Después del choque perdido en Pontevedra ante el Celta de Vigo al Athletic Club les toca parar otra vez. En la anterior situación todo eran vino y rosas. Se acaba de pasar por encima de la Real Sociedad en el derbi de San Mamés. Ahora ese panorama ha cambiado bastante. Iñigo Martínez se irá con la selección Absoluta de Robert Moreno, y los pupilos del hoy algo zarandeado Gaizka Garitano soltarán músculos en un triangular en Lasesarre tratando de olvidar los dos tropiezos.
Habrá que esperar al domingo 20 para tener sesión completa, como en los viejos cines. Por la mañana la primera asamblea del presidente Aitor Elizegi, en el Euskalduna, y por la tarde a San Mamés al duelo ante el Real Valladolid.
Que duda cabe que se afrontan mejor estos actos con victorias. No es que la cosa vaya mal, pero los parones con dos derrotas consecutivas sin marcar generan dudas y debates. Y eso afecta al equipo. Quiera o no es un ser vivo con un entorno y, seguramente, preferiría jugar cuanto antes contra los pucelanos.
La última vez que el Athletic Club había perdido dos partidos consecutivos fue hace once meses. Fue bajo el mando, aún, de Eduardo Berizzo cuando los rojiblancos perdieron consecutivamente frente al RCD Espanyol (1-0) y el Atlético de Madrid (3-2).
Los rescoldos electorales del 28 de diciembre garantizan un ambiente 'cálido' para la cita con las urnas en el atrio del palacio. Hay ciertos grupos a la espera de atizar a todo lo que se mueva. Haya o no perdiz. Como en el tema de la llamada hucha. Veremos cómo transcurre la cosa, pero sin duda ganando partidos el ambiente suele ser más reposado. A fin de cuentas a la mayoría de socios y socias lo que le preocupa es que la pelota entre y no le suban el carnet.
