¿Podemos hablar ya de crisis en el Athletic?

Dicen que no hay mejor sitio para zanjar un inicio de crisis que el campo de uno de los 'gallos'. Pero el grado de dificultad es máximo. Sobre todo si fuera no ganas ni llevando estampas bendecidas por la 'amatxo' al vestuario. El Athletic Club visitaba este sábado al Atlético de Madrid en una nueva jornada de LaLiga Santander. Los leones buscaron sus primeros puntos en el Metropolitano, donde solo conocen la derrota desde que se inauguró. Eso para la Historia. Pero tras empatar con el Real Valladolid se ha empezado a escuchar la palabra crisis, cosa que no se contempla en el vestuario, dicen Dani García y Unai López. Pues, señores, después de caer en la décima fecha del calendario, por (2-0), sumando 2 de los 15 últimos puntos, como mínimo habrá que hablar de que algo no marcha.

El árbitro Hernández Hernández estuvo muy mal. Sí. Perder contra los de Simeone entraba en las opciones, sí, pero no vale hacer el avestruz. Ante RCD Espanyol y Villarreal CF hay que rascar mucho esta semana o los de abajo ya no estarán tan lejos. O se cambian jugadores, o se cambian ideas, pero hay que espabilar pronto. El pasado curso se rozaba el triunfo en el Metropolitano y solo dos tardíos goles lo impidieron. Dolieron como puñaladas. Sobre todo el gol del 'cojo' Godín. Pero en esta visita de hoy lo que te deja mal cuerpo es ver que en las segundas partes el equipo se va abajo, que no confías en que pueda remontar. La nada.

Un gol en cada tiempo noqueaba a un Athletic que empezó jugando bien, pero que sigue sin ganar fuera de Bilbao y le cuesta un mundo marcar: suma un tanto en cuatro partidos

Los 'Unais', Simón y Núñez, empezaron al garete

Garitano, que perdió en el último entrenamiento a Beñat por un esguince, optó por hacer buena la petición de usar otro central. Los errores de Yeray ante los pucelanos le condenaron a la banqueta. De allí emergía un Unai Núñez que quiere jugar para dar su placet a firmar una extensión de contrato. También Yuri, con el hombro mejor, recuperó plaza entre los que arrancaron el choque. Y se empezaba muy bien.

¡Qué tendrá que hacer Iñigo Martínez para marcar! Apenas se llevaba un minuto de partido cuando Oblak tuvo que volar para despejar a córner el cabezazo del defensa de Ondarroa. Una espera extensible a la del balón parado. El Athletic está gafado, porque ya no puede ser cosa de sólo de una mala ejecución. Y ya lo de Unai Núñez de coger con la mano un balón cerca del área pensando que no estaba en juego,... si llega a acabar en gol es para tirarse al Manzanares.

Su tocayo, Simón, también tuvo un 'cante' fuerte en un balón colgado o una salida con el balón en los pies de un alevín, pero en fin, no es que hubiera problemas de verdad. Tras ese inicio trompicado, con buena nota bilbaína (60% de posesión), el duelo iba teniendo color foráneo. Lástima que algún balón para Williams no llegara por poco a ser rematado. La imagen de los primeros 25 minutos fue francamente positiva, pero es lo que tienen los aspirantes a títulos. A la primera que tuvieron, Saúl Níguez marcaba tras una gran jugada de Correa, que por cierto volvió loco tres veces a Núñez.

Estos días él y Yeray están bajando muchos enteros. No se sabe si es por carencias o por el 'runrún' que les acompaña de pelear por una plaza, que les altera, pero han dejado mucho que desear en su desempeño. Ahora mismo, más allá de internacionalidades, el central fichado un invierno por Josu Urrutia de la Real Sociedad está dos escalones por encima de ellos.

Otra vez se deshincha el Athletic en la segunda parte

Justo o injusto el Atlético ya ganaba, algo en lo que los de Simeone tienen un cum laude. Mientras Raúl García, que por cierto fue ovacionado, no paraba de intentarlo, o se sumaban hasta seis saques de esquina, a los madrileños les había bastado con muy poquito para generar el peor supuesto. Que fueran ganando y gobernaran el choque en su salsa. Por tanto el 1-0 al descanso fue un poco descorazonador, porque se había jugado bien, e incluso, para ser lejos de San Mamés, muy bien.

El guión en la reanudación fue el previsto. El Athletic acumulaba posesiones largas pero estériles, sin poder profundizar, mientras la grada, buena conocedora del paño, se lo pasaba bien cantando en espera de sumar los tres puntos. La contramedida fue meter a Ibai por un Córdoba que sigue desperdiciando oportunidades. El tomatero no la olió en 54 minutos esta noche.

El de Santutxu fue capaz de generar un buen pase que Iker Muniain pescaba de tijera, pero su escorzo llevó la pelota al lateral de la red. No así el de Álvaro Morata, que en el 64', completamente solo, certificaba la defunción vizcaína en boca de gol. Un 2-0 mortífero que llevó a Garitano a tirar de Aduriz por Williams, al que no se le había puesto un solo balón en condiciones. Sin espacios, sabido es, y el 'Cholo' hábilmente se los quitó, no tiene papel en el campo.

La recta final del partido, en la que entraba De Marcos, se hizo eterna. Los tres cambios, todos de 'treintañeros' o casi con Ibai, que tiene 29, no sirvieron para nada y Unai Simón se jugó una roja en una salida escorada a los pies de Diego Costa. Visto el arbitraje dio miedo, pero aquello se quedaba en tarjeta amarilla. Fin del drama. Hay que ganar al Espanyol el miércoles en San Mamés sí o sí. Si no hay crisis al menos hay que olfatearla para que el equipo se ponga tan firme como en la pasada liga. El colchón que dejó el liderato está ya en la reserva.

Todos los resultados en https://resultados.eldesmarque.com