Hastío arbitral en el entorno del Athletic

Ciertamente los últimos arbitrajes y actuaciones del VAR que está padeciendo el Athletic Club están soliviantando los ánimos en buena parte del entorno rojiblanco. Los dos últimos partidos, el de la ida de las semifinales de copa ante el Granada CF en San Mamés, y en LaLiga Santander el derbi ante el CA Osasuna, también en la Catedral, han terminado de rebosar el vaso de la paciencia de muchos aficionados.

No son pocos los que quieren que desde el club, sea de forma pública o en labores soterradas de cocina, se proteste por los arbitrajes que están padeciendo reiteradamente los leones. Total, desde fuera siempre van a decir que ‘protestan porque no ganan’ sin enjuiciar las situaciones. Pero estar están ahí.

Ante los nazaríes de Diego Martínez el baremo arbitral fue poco equidistante. Aparte de las tarjetas no vistas como por las pérdidas de tiempo, se acabó con la decisiva jugada del tanto de Ander Capa en la que se pitó fuera de juego de Iñaki Williams. Un gol que podía haber dejado la eliminatoria casi resuelta.

Este domingo en la derrota ante los rojillos de Jagoba Arrasate en Bilbao, se anularon dos goles a los vizcaínos, aparte de solicitarse dos penaltis. Uno, tal vez discutible, del meta Sergio Herrera sobre el propio Williams, pero otro de escándalo con una nítida mano en pleno área de Unai García.

Ni el colegiado asturiano González Fuertes ni el VAR vieron nada punible. Pero la imagen de la mano del defensa osasunista, que acompaña esta información, es irrebatible. Aparte de que en otros encuentros de LaLiga Santander se han visto muchas jugadas similares en las que siempre se ha decretado la pena máxima.

A esa quemazón se une el hecho de que el equipo visitante pudo ver alguna tarjeta más, empezando por un Nacho Vidal que perfectamente pudo ser expulsado por reiteración de faltas y alguna mano estando ya previamente amonestado. Además el tiempo de prolongación decretado pareció demasiado corto después de los cambios, los parones y algunas pérdidas claras de tiempo.

Y el VAR también lleva lo suyo

Lejos de haber acabado con la polémica arbitral, parece que la ha disparado. No solamente por sus decisiones sino también porque cada vez que se tiene menos claro su ámbito de influencia. Decisiones contradictorias han terminado por poner en tela de juicio un sistema que venía a restaurar la justicia en el planeta fútbol.

Cada vez se sospecha más de la connivencia y el corporativismo entre la sala VOR y los colegiados que están sobre el terreno de juego para cubrirse las espaldas. De hecho, recientemente el Real Betis llegó a solicitar el contenido de las conversaciones entre ambas partes para ver cómo podían justificar una jugada resuelta de forma incomprensible.

Las quejas de Ander Capa

“En el arbitraje no nos vamos a meter mucho. He visto una jugada por una red social que ha habido una mano no sé de quien en un taconazo de Williams y no entiendo nada. Parece que el VAR nos perjudica siempre a nosotros. El otro día un fuera de juego que nos pitan por Williams, hoy no pitan nada... no sé para qué está el VAR. Al final ves esas imágenes y se ve claro... ¿para qué está el VAR?“, se terminaba preguntando el ‘Mustang’ de Repelega.