¡Ay, Bilbao, qué solo estás!
La pandemia por el coronavirus COVID-19 ha vaciado los espacios públicos de las principales capitales del mundo. El confinamiento obligado ha convertido las calles de las ciudades en un escenario de atrezzo sin actores. Estampas insólitas de grandes urbes sin actividad humana. Silencio y soledad. Nuestro querido Bilbao también se siente así, mudo y solo.
Como si se tratase de un escenario post apocalíptico. Así se muestra Bilbao en un vídeo que circula este martes por Whatsapp. El silencio es el sonido de un breve recorrido por calles y zonas antes de vida: Hurtado de Amezaga, la Plaza Circular, con la estatua de Don Diego López de Haro elevado sobre la soledad de la Villa que fundó en 1.300.
La Calle Navarra sin tránsito en su descenso hacia el Puente del Arenal. La iglesia de San Nicolás, sin feligreses; el Teatro Arriaga, mudo de representaciones. O las antes bulliciosa Plaza Nueva, Plaza de Unamuno o Iturribide, sin la algarabia de los aperitivos dominicales.
Bilbao seguirá con sus calles vacías durante las largas semanas de confinamiento que aún quedan por delante en esta fría primavera de 2020 que no está tocando vivir.