Muniain se machacó cual espartano: vuelve del parón con mejores mediciones
El 4 de octubre de 2009 un imberbe Iker Muniain (Iruña, 19 de diciembre de 1992) marcó en el Estadio José Zorrilla al Real Valladolid su primer gol con el Athletic Club en LaLiga Santander con apenas 16 años, 9 meses y 15 días, un récord de precocidad en esa fecha. Y este domingo el navarro volvió a marcar, bastante más maduro y ya con barba, ante el Atlético de Madrid en San Mamés en lo que ha sido la vuelta del campeonato a Bilbao.
Sin lugar a dudas el capitán rojiblanco ha sido el hombre más destacado entre los de Gaizka Garitano en la prensa vizcaína. Demostró un gran momento de forma, aunque por dentro llevará el enorme dolor del fallecimiento de su abuelo paterno durante la pandemia del coronavirus COVID-19. Familiar al que le dedicaba al tanto señalando con sus dedos hacia el cielo junto al resto de víctimas de esta tragedia.
El buen rendimiento del capitán, que acabó vaciado tras dirigir a su equipo durante sus mejores minutos, volvía a revelar que el técnico, Gaizka Garitano, suele optar por poner en casa por dentro a Iker y generalmente fuera le escora en banda para darle al equipo mayor presencia en los duelos aéreos con Raúl García. Seguramente eso se pueda ver el miércoles en Ipurua.
Iker Muniain ha trabajado sin descanso durante el confinamiento, lo que le ha permitido volver con mejores datos en las mediciones tomadas en Lezama de los que tenía antes del obligado parón del fútbol
Iker Muniain, en su sitio, es otro futbolista
Enganchó tres oportunidades de gol, la tercera con el éxito de que acabase su toque sutil en la red del gran Oblak. Una acción combinativa en las que se solía prodigar el Athletic nacida en Iñigo Martínez y finalizada con clase y fortuna por el capitán a pase de Yuri Berchiche, el otro gran destacado en San Mamés.
Pero está vuelta resonante de Muniain no es fruto de la casualidad. Según ha podido saber ElDesmarque Bizkaia Iker se ha machacado a fondo durante el confinamiento para regresar como un tiro. Aparte de lo que le demandara el Club no ha perdonado las sesiones, vía Ipad, de mañana y tarde con su preparador personal.
Y ya cuando las fases de desescalada le permitían moverse de su domicilio en Bilbao le tocaban las sesiones de balón y carreras en ese campito que posee en una localidad vizcaína. Ha sido un espartano que no ha ahorrado la menor gota de sudor para volver en buenas condiciones. Ante el verdugo del Liverpool sin duda se le vio con gran chispa mientras le duró la gasolina.
De los pocos peros al Athletic en su regreso es que no se pudo aguantar su gol y vencer al Atlético. Porque Europa, el objetivo para este inédito sprint final postconfinamiento, sigue a la misma lejana distancia de cinco puntos con tres rivales por delante. En Ipurua este miércoles, si repite partido ante la SD Eibar, puede empezar a aminorarla.