Garitano defiende a Sergio: "Habría que hacerle un monumento en Valladolid"

Gaizka Garitano ha comparecido en sala de prensa. El entrenador del Athletic Club subrayó que al técnico del Real Valladolid, Sergio González, "habría que hacerle un monumento" en la capital pucelana. Esto se debe al "trabajo que ha hecho y está haciendo" en el equipo blanquivioleta en las últimas temporadas.

"Cuando eres entrenador todo el mundo esta en entredicho. Koeman, Zidane hace dos semanas... en los grandes también. Es lo que va dentro de la profesión, estar siempre cuestionado", apuntó Garitano sobre la situación del técnico catalán en la rueda de prensa previa a la visita al actual colista de LaLiga Santander.

"Nos pasa a todos los entrenadores de Primera, sin excepción. Cuando no ganas, el primero en ser cuestionado es el entrenador. Lo vemos dentro de la normalidad", añadió el vizcaíno. Lo hizo tras incidir en que ganar este encuentro "sería fundamental" después del triunfo en la última jornada frente al Sevilla.

Para Garitano, no obstante, "la confianza de haber ganado" ese último partido e San Mamés no debe convertirse en "exceso de confianza". Aunque el Athletic ha "respondido bien en momentos críticos", cree que les ha llegado el momento de "dar un paso más" y "sentir la necesidad de ganar".

"El Valladolid tiene buenos jugadores de mitad hacia arriba y hay que tener cuidado, pero más que nada hay que pensar en nosotros. Intentar ser agresivos e ir a por la victoria desde el primer minuto. Que sea vea un buen Athletic, con las ideas claras y agresivos en ataque", reflexionó.

Garitano no da pistas sobre su once ante el Valladolid

Acerca de su equipo, Garitano no desveló si repetirá la fórmula de colocar en el once a dos extremos puros como Alex Berenguer y Jon Morcillo y dejar de inicio en el banquillo a Iker Muniain y únicamente señaló que su idea es "mezclar bien" a sus futbolistas para que el equipo "sea competitivo al principio y al final".

"Iker es muy importante para nosotros y casi siempre ha jugado de inicio. Tenemos jugadores que dan otra frescura desde el banquillo y otros más para jugar desde el principio. Con tantos cambios, necesitas alguien desde el banquillo en esa última media hora. Ahí tratamos de ajustar el plan, no solo para el comienzo", explicó.