De la quema de contenedores al petardazo. Fue frustrante... La tarde empezó horriblemente mal, con incidentes en Pozas, y acabó luego fatal en Andalucía. Después de 37 años sin oler la gabarra, a 863 kilómetros de casa, solo, sin su afición en la grada, con una pandemia mundial de por medio el unicornio rojiblanco, el Athletic Club, ha disputado otra final de Copa, final que ha vuelto a perder... La historia es la historia. Y pesa, como pesa el escudo. Pero se esperaba mucho más empaque del equipo que contaba con el factor experiencia a su favor, más ardor guerrero. Otra sensación de al menos competir con sus verdaderas armas. Bonitas o feas, pero las que daban esperanzas y optimismo. ¿Fue acaso un espejismo nacido de la ilusión de enero en Sevilla?
El conjunto de San Mamés se ha quedado a las puertas de lograr su ‘orejona’ 25 tras caer este sábado ante la Real Sociedad en el Olímpico de La Cartuja de Sevilla por (0-1) con gol de penalti de Oyarzabal. Los de Marcelino han fracasado por completo con una imagen muy alejada de la de la Supercopa. Ni intenso ni equilibrado, hoy sólo se han visto sus carencias en ataque ante un rival que con muy poquito hizo más para imponerse, pero que para nada se lució. Castigó un error y se llevó el trofeo atascando hasta la nada la segunda mitad como si fuera el carguero ‘Ever Given’ en el Canal de Suez. Punto. Merecido ganador. No le podemos quitar su mérito.
Un resultado que puede ser llave para encarar la 'otra' final, la del día 17 ante el FC Barcelona en el mismo escenario. El criticado Luis Enrique ha estado hoy en el palco, al igual que el rey, que se ahorró la pitada esta vez. Mas ojo al disgusto. ‘Lo’ de 2012 con Marcelo Bielsa empieza a asomar en el horizonte... No se puede consentir bajar los brazos. Hay que intentar el camino más difícil: batir al Barça de Messi e ir a Europa. Ahora es el partido de la vida de esta plantilla. Domingo de resurrección pero ya.
Con las finales no se experimenta dicen, se va con todo, pero al parecer el técnico de Careñes no ha perdonado el grave error de Unai López ante la SD Eibar. El joven Vencedor, 20 años, saltó por él junto a Dani García en la sala de máquinas. Fallido. Estos once leones no habían salido juntos de inicio nunca... Y han estado mal, muy mal. Marcelino no acertó hoy.
Vayamos por partes. Los vizcaínos fueron a presionar en bloque alto para incomodar a una Real que la quería sacar jugada desde atrás. El diluvio universal acompañó a un arranque nervioso, de escasa precisión, con el césped rapidísimo ante la cantidad de agua caída. Los dos equipos parecieron asustarse porque levantaron el pie del acelerador.
Rulo en una contra fue el primero en atreverse a chutar un balón que salió por la otra banda. ¿Miedo a perder? El choque tenía mucha pala y poco pico. Los dos porteros, salidos de Lezama, no tuvieron casi trabajo en todo el partido. Sigamos. Al menos Berenguer y Yuri comenzaron a percutir por las bandas dando cierto dominio, leve, a los zurigorris. Tan tenue que duró nada, claro...
La primera mitad cumplió la previsión: la Real jugó mejor, con mucha posesión, pero el Athletic fue el que la tuvo más clara
En el lado de los de Alguacil eran Isak y Silva quienes provocaban más desajustes, lo que generó alguna jugada complicada pero bien defendida. Lo cierto es que la Real tuvo momentos realmente buenos a partir del cuarto de hora, con un 70% de posesión, pero el fútbol va de más cosas que de tocarla entre tus defensores. Cada cual ahí iba a lo suyo. Por ejemplo en realidad fue Álex Remiro quien tuvo que hacer un paradón a un gran disparo lejano de Iñigo Martínez.
Ese disparo estuvo genial pero no tapaba el flojo papel de Berchiche, Williams y de un Iker Muniain que encima era un flete para tapar su banda. La Real siempre se iba a por Yuri. Aparte, otro protagonista, el colegiado Estrada Fernández, amonestaba a Dani García en el 34 tras haber permitido varias tarascadas a los donostiarras. ¿Vieron las faltas? En el intermedio 4 del Athletic y... ¡11 guipuzcoanas! Ese era el panorama al llegar al descanso tras un primer tiempo equilibrado por lo pobre: uno tuvo el balón y otro la mejor ocasión. Poco más que eso y la lluvia torrencial vimos.
La segunda parte empezó más liosa con una mano (codo) de Iñigo Martínez que el VAR revisó, con un buen parón, y que acabó luego en falta fuera del área. Menudo estrés, se palpaba la tensión como en un western de Sergio Leone. Mal augurio... Se ve que el defensa vizcaíno estaba predestinado a pasar por el trago de hacer esta noche una pena máxima: Iñigo derribó luego a Portu -tras un error de Yeray- y el trencilla catalán le mostró la roja al central de Ondarroa.
El propio árbitro se fue a ver el VAR y le hizo volver a Martínez tras haberse ido este ya al túnel de vestuarios para enseñarle ahora una rebajada tarjeta amarilla. De traca. Y el penalti, tras un mundo, se lanzó en la final más larga de la historia. Gol. Esa jugada de circo bufo trajo el 0-1 de Oyarzabal, en el 63', y la muerte de la maldita final de 2020. Poco más se jugó ya.
Es que el gol hizo mucho daño. Nada más sacar de centro se hizo una falta en la frontal del área que Isak estrellaba en la barrera. Los nervios ahí ya deshicieron a los Leones. Hubo que tirar rápidamente del castigado Unai López para dar un impulso al equipo, que estaba naufragando en la faceta creativa y, lo que es peor, incluso en la física. Vesga y Villalibre fueron los siguientes en salir en un desnortado Athletic que lo estaba pasando fatal sin dar 3 pases seguidos ni sacar ningún rédito tampoco al balón parado. Y eso que se había hablado tanto tanto de la flojera defensiva de la Real, de los 6 que le clavó el Barça, etc,... pues liderados por Mikel Merino no pasaron ni un apuro.
Y en ventaja la Real se asemejaba curiosamente a un Getafe. Mucha falta, mucho parón, mucho despeje, mucho futbolista doliente por el suelo pero nada de su catalogo ese del Ajax de Amsterdam.
El papel de los de Marcelino, cabreadísimo, necesitaba presenciar un milagro, porque de fútbol más bien poco por no decir nada de nada en toda la segunda mitad. Hasta 8 minutos hubo luego de prolongación. Lógicos por los parones y cambios, pero fueron igual de desaprovechados que todo lo ocurrido tras llegar el 0-1. Un masivo agujero negro en ataque con muchos pesos pesados desaparecidos. Todos más bien. Qué palo y qué bajón. No vimos un buen Athletic. No pareció él.
Toca levantarse aunque sea con unas grúas. Hay que rehacerse que el 17 hay otra final y cuesta mucho llegar a ellas. No entra en el ADN de este Club darla por perdida ni en broma. Marcelino tiene trabajo. A ver si yendo de humildes víctimas propiciatorias ante los culés sale la cosa mejor.
Es de locos pero este miércoles 7 los dos equipos se ven las caras otra vez en Anoeta en partido de LaLiga Santander. Las cosas del fútbol.
Con un tiro a portería.Fuera del área y por un defensa. SR. MARCELINO " PARA ESTE VIAJE NO HACE FALTA ALFORJAS" Usted no se puede hacer ni idea, lo que hubiera ocurrido con GARITANO en su lugar. Ahora lo hacemos más bonito y más limpio, PERO CON EL MISMO RESULTADO. NADA DE JUEGO NI IDEAS.
A ver, Antzoka, que algunos ya estamos un poco hartos de madres consentidoras que lo perdonan todo. Un buen progenitor no es el que siempre nos saca la cara, sino el que no tiene reparos en reprendenos cuando hacemos algo mal. Y ayer el Athletic fue una calamidad merecedora de una buena bronca.
Mal partido. Los que hemos jugado a fútbol, sabemos que hay partidos que aunque quieras te salen mal. Este ha sido uno. De los malos partidos se pueden sacar buenas conclusiones. Espero que Marcelino las haya sacado y tome medidas para próximos partidos. La pérdida ha sido una pena y me duele como Athleticzale. Una de las cosas que a mí me llama la atención es que se sigue apostando por Williams, no lo comprendo, porque ni defiende, ni ataca, ni chuta ni coge un balón de cabeza. Villalibre pide a gritos más tiempo. Porque no poner a Sancet, jugando en el medio campo, es un jugador que tiene buena visión de juego y pasa muy rápido y bien el balón. Se está defenestrando a Iñigo Vicente, no lo entiendo, que es verdad, no defiende mucho, tampoco Williams, pero en todos los partidos da 3 o 4 pases de gol. Quiero al Athletic de todo corazón, así me lo inculcaron mis aitas. Seguiré siempre siendo un Athletizale. El cariño, el amor y la fidelidad se demuestra en los malos momentos, apoyando, comprendiendo y animando para que superen esas situaciones. ¡¡¡AUPA ATHLETIC!!!, Los verdaderos ATHLETICZALES estaremos siempre contigo y superaremos todas las dificultades.
Aquí hay algunos pronosticadores que llevaban tiempo callados y han esperado pacientes a una decepcion para volver con lo mismo. La baja calidad. Pues estos jugadores son los mismos que se merendaron al Madrid y al Barsa en la Supercopa. Se les va y se les viene la calidad? Muniain que ha hecho recientemente unos partidazos otra vez a la grada. Qué memoria tan selectiva. Discos rayados después de un mal día. Hemos jugado seis finales, no cuatro, y hemos ganado dos. No se nos olvide. Y aún pueden ser tres si los cenizos esperan un poco.
Vale que una final se puede perder, pero es que lo que hemos visto esta noche...O, mejor dicho,lo que no hemos visto, porque el Athletic ni ha comparecido. Como para ganarle al Barça dentro de 15 días. Pocas esperanzas me quedan, la verdad.
El penalti me parece injusto, no es penalti en absoluto. Pero no entiendo como nuestro equipo y cuerpo técnico han estado no se cuantos días preparando este partido y todo para que el resultado sea un tiro a puerta y desde fuera del área. Que decepción
Al equipo le falta calidad. Dimos pena. La real sin hacer nada nos gana siempre. Mejor equipo. 4 finales pérdidas y seguro que serán 5.
Vuelvo a decir lo d siempre.. No es cuestión d entrenadores solamente. Son las carencias del equipo.. Vencedor ya lo advertí q será un gran futbolista pero d momento no es nadie y hoy se notaba q el partido le le daba grande.. Otra vez q la Real sin hacer nada nos mercado con merecimiento.. Tenemos 6 jugadores buenos lo demás.. Son del montón y el equipo lo paga.. Puxa athletic