Dudaba, de manera seria o jocosa, con mucho o escaso peso, con fundamento o sin él, de si empezar esta contracrónica del triunfo del Athletic Club en Villarreal por el principio o por el final, dándole protagonismo a Lekue, por permitir que Gerard Moreno recibiera la pelota sin su acoso, o a Galarreta, por dignificar el fútbol con su magnífico, soberbio gol, y su divina presencia. Dudas, duda, que uno debe disipar para poder ponerse en marcha mediante el milagro continuo de la palabra. Cargada estaba Lezama de técnicos 'expertos' que veían pero no miraban; o de prejuicios, tal vez.
De no apreciar, como merecían, las palabras que un 'Loco' llamado Marcelo Bielsa le dedicó a uno de sus pupilos, alumno joven y aventajado. "Ruiz", le decía al que en Iñigo Ruiz de Galarreta veía "el 4 del Athletic". Sobre su planta cuadrada se habrá de levantar la primera nave de la "Segunda Catedral"...
No vivió Marcelo Bielsa para poder poner en marcha un proyecto tan ambicioso. Su alejamiento del Athletic fue el mismo que 'Galaxy' sintió a partir de que su rodilla le empezara a fallar.
Excusas, en cualquier caso, porque las lesiones así como llegan se van. Por entonces, Galarreta se convirtió en el "señor de las cesiones". Mientras, en Lezama, los que veían no miraban, o los que miraban no veían. Hasta que alcanzó su libertad. Habría de ingresar en el 'Club de los 30' para que el Athletic decidiera que volviera a casa el que tanto se había prodigado.
Ocurrió en 'La Cerámica', suelo de lujo, domingo a la luz de la luna. Un minuto. Para que más. La vida es eterna en sesenta segundos. "Te recuerdo", le decía a "ella", ahora que lo más hermoso que juntos han creado descansa en esa cuna interna que es el vientre de una mujer. Y es por ello que en tu día quiero enviarte lo más bonito que por mi condición de futbolista atesoro. "La vida es eterna en sesenta segundos"...
Un ligero protocolo. La puesta en marcha, no más. Sentir al equipo. Sentirme a mí mismo, sentirte a ti cuando la pelota vuela rasa y la apaciguo con mi pie. De seguido, lo que todo el mundo vio sin dar crédito, o lo que fue registrado sin que apenas fuera visto. Acomodarme la pelota a mi derecha, cerquita de mi. Leve. Liviano. Todo es levedad antes de que se produzca la 'explosión de Dios'.
Aquella cosa esférica y diminuta que el titán de otro mundo golpea con violencia inusitada. Contacto tan brutal, como sutil, elegante. Hermes mensajero con la promesa del gol. Algún día tenía que ser. Siempre hay un primer momento pata todo. Y este es el tuyo, Galaxy, acertó el que te puso el apodo, "Esta es la historia de un niño, de un animal de Galaxia". Relato de su primer gol en la élite. Con el Athletic, con qué equipo, si no.
Es el [0-1] de un partido en el que se verá que, cuando se lo propone, cuando se esmera entre semana, Ernesto Valverde es capaz de que los leones protagonicen un partido sublime. Son los 'astros', entonces. Tiempos de 'leyendas' y 'mitología'. Cuando el Athletic vestía como los hombres de hoy. Ese azul, por Dios, qué gusto da lo que nunca muere; lo 'Vintage'. Y las medias, franjas rojas, y blancas también. Cuando la indumentaria y el talento van de la mano.
Sancet, volando cual águila a cuyas alas se suben sus compañeros. "Es el mejor jugador al que he entrenado" sostiene el 'Gallo' que comía 'bakalao'. Ohian, selva donde se fragua la revolución tramada por el 'comandante' 'Txingurri'. Liderada por Sancet, ciervo majestuoso que si es herido "busca en el monte amparo".
Revolución sostenida por Iñaki Wiliams. Peleada cuerpo a cuerpo por Nico y Guruzeta. Vesga reparte las armas. Galarreta dispara: ¡arma, tiro, pum!... En la retaguardia, tres aguerridos y un díscolo lateral que juega a pierna cambiada. Bajo el travesaño, Unai Simón Mendibil, ¡colosal!, no fueron inventados más adjetivos que definan al que podría ser el sucesor de Iribar.
Entre Nico y Ohian, el segundo tanto, 'paredes' sin Aitor para que el pequeño de los Williams la clave. Y ahora qué hacemos. Lo mejor. Lo único que este equipo sabe hacer. Mirar la portería rival y atacarla. Técnica de lujo la empleada por Iñaki para que su disparo resulte letal. La venganza es un plato que se sirve frío. De cerámica lujosa, gentileza de la casa. Camino de reventar el [5-1] del curso anterior. Si en la segunda mitad los derroteros son los mismos, o similares.
Agonizaba el partido a la vez que el cuadro groguet lo hacía. Algo extraño debería suceder. Y sucedió. Experto es el Athletic en sabotearse. Una línea defensiva bien marcada. Llama la atención, empero, la distancia existente entre Lekue y Gerard Moreno, que se había dejado caer, con desgana y desidia, buscando el olor a fútbol que desprende la cal de la línea de banda. Aquí estoy, si alguien me ve, apiádense de mi, que la noche no me es propicia.
A diez metros de él está Iñigo Lekue, distancia abusiva que denota desprecio hacia la zurda sedosa e inteligente de un jugador virtuoso. Alguien lo divisa. Tómala, Gerard. A partir de su recepción, lo esperado y temido por todos menos por Lekue y su entrenador, Valverde, que para el 85' ha desfigurado el equipo a base de nombres y posiciones. "La muerte" -de medio equipo- "tenía un precio". El gol cantado de Gerard Moreno que no necesitó burlar a nadie porque el 'ingeniero de Deusto' se había borrado de la lucha por el balón.
El desastre táctico de Lekue acaba de meter al 'submarino' en las aguas del partido.
Un minuto necesitó 'Galaxy' para abrir el marcador. Entre uno y dos, Moreno y Sorloth para ponerse a tan solo un gol del exceso que parecía un [0-3] en campo rival. Tiempo para sufrir. El empate o la consumación de la remontada. Algo que a Valverde no le habría extrañado. "En el fútbol pasan estas cosas". No pasaron. Pero a punto. Ernesto Valverde y la negación total de autocrítica.
Poco, apenas, como si se le temiera, se le pincha en el turno de preguntas. De lo sublime a estar a un tris de la derrota. Lekue, entre la negligencia y la prevaricación. Pero como me apetece un postre dulce, recupero el soberbio gol que 'Galaxy' le dedicó a esa criatura que flota en las cálidas aguas del vientre de la mujer que ama.
• Por Kuitxi Pérez, periodista y exfutbolista
🛡 Cuando todo parecía decidido... Iñigo Lekue ⛔
Gutariko bat. Uno de los nuestros. #VillarrealAthletic #AthleticClub 🦁 pic.twitter.com/kVYtxph8t2
— Athletic Club (@AthleticClub) November 7, 2023