La noche acabó en bronca... Y eso que, 40 años después, se puede volver a gritar aquello de 'Athletic Txapeldun' con el Athletic Club otra vez campeón de Copa, como si fuera un mítico anuncio televisivo de fabadas. Un trofeo conquistado con el liderazgo de un Ernesto Valverde consagrado, que ha desbordado todas las previsiones con el paseo de la gabarra por la ría. Pero ay amigo, este domingo tocaba volver a la realidad y al 'tajo' en San Mamés ante un rival peliagudo que es un coco lejos de su estadio y se llevó un punto en plena polémica arbitral. "No entiendo nada", dijo Sancet al acabar.
Con el billete para la próxima UEFA Europa League sacado, el Athletic pelea por ir a la Champions, y ha tenido que remangarse (después de mucha juerga) para enfrentarse al Villarreal CF de Marcelino García Toral ante 50.061 espectadores. Un choque que ha terminado con un (1-1) merced al gol de volea de Oihan Sancet y al de penalti, protestadísimo, de Dani Parejo en el tiempo de prolongación por mano de Yuri Berchiche en un rebote en el suelo.
Marcelino admitió que "si a mi me pitan ese penalti me hubiera enfadado muchísimo, pero también para que te expulsen hay que hacer algo más que Comesaña. Al final se ha compensado todo"
Se ha desatado la locura en Bilbao, se vio en el doble pasillo previo, de los castellonenses y de los campeones de Javier Clemente, antes de meterse al lío con un tonto y claro penalti de Beñat Prados que Gerard estrelló en el poste de Unai Simón. La grada cantaba todo el repertorio y el duelo, bonito, iba de lado a lado con remates de ambas escuadras, aunque mayor posesión groguet, cuadro que tuvo otra ocasión clarísima de Baena sacada por Vivian.
La presión bilbaína no era la habitual, ante un equipo con grandes peloteros, como Parejo, pero con el paso de los minutos el Athletic mejoró y el Villarreal llegó a ver hasta 2 amarillas en una misma contra vasca. Al descanso se llegaba con el marcador sin moverse pese al tono amarillo de los 45 primeros minutos, que bien pudieron ver algún gol visitante, ya que el equipo de Valverde fue notando los festejos y perdiendo chispa.
Una expulsión de Comesaña en segundos iguala las fuerzas en San Mamés
A la vuelta, Comesaña fue expulsado en apenas segundos de juego al ver la segunda amarilla, muy rigurosa, lo que dejó a los castellonenses con 10 el resto de la tarde. Ahí ya el Athletic se adueñó del choque, con Ander Herrera, pero no lograba hacer ocasiones más allá de enfadarse con el colegiado. Algo que cambió con el golazo de Oihan Sancet, en el 66', de volea a pase de Guruzeta con unas líneas milimétricas del VAR.
El arbitraje, muy contestado, decide el partido en la recta final
El susto final de Vivian, arrollado en un salto por Unai Simón, hizo que el público se preocupara mucho, pero el central internacional pudo regresar al partido aunque fuese a medio gas para ver como el Athletic, con 6 minutos de prolongación y una revisión de mano del VAR en el 91' a Yuri, se desesperaba porque la noche acabó en penalti en un rebote y gol de Parejo por la escuadra con una bronca monumental en San Mamés, que ve como se escapa el Atlético en la tabla.