Al Athletic no le salvó ni Dios de la condena impuesta por un noruego

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El Athletic no vio el milagro pese a la elección del Papa
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La goleada en San Mamés y las lesiones exigían más que un milagro
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Manchester United 4 - Athletic 1: adiós a Europa en Old Trafford y a pensar en la Champions
En una semana revuelta en el tema clerical, mientras unos buscaban al sustituto de un Papa fallecido, otros buscábamos resucitar a los jugadores lesionados del Athletic Club y evitar que fueran sustituidos por otros que no suelen entrar en las papeletas del entrenador. Los que dicen estar más cerca de Dios estuvieron recluidos para sacar un nuevo dirigente del mundo católico.
Al enterarse de que jugaba un equipo único en el mundo humano y cuyo emblema es un león, se pusieron en contacto con un santo cercano a ese equipo, San Mamés, que les dijo que tenían una catedral como sede aunque mucho más modesta que donde ellos estaban reunidos y eran ayudados por una virgen de nombre Begoña, se apiadaron y decidieron elegir un "jefe" que quiso ponerse de nombre León XIV haciendo un guiño a ese club.

Me puedo imaginar que si hubiesen optado por un cardenal negro para ser Papa igual opta éste por llamarse Nicolás I, Nico para los conocidos de la curia.
No hubo milagro para el Athletic pese a la Fumata blanca
Intentaron, al final sin éxito, salvar de ir al infierno a un sitio al que les condenó un noruego que uso por fumata un silbato y expulsó del templo, injustamente, a unos de sus feligreses vestido de rojiblanco dejando indefensos al resto de almas que luchaban en buena lid, contra unos insurrectos ingleses.
Además, se enteraron que los fieles seguidores de ese equipo tenían fe, creían en milagros, de remontar las penalidades. O sea, todo muy bíblico . Pero se les olvidó hablar con el Ser Supremo, con el que manda por encima de todos y todas los seres humanos, ese en el que la gente se caga cuando algo le sale mal.
Es verdad que quiso echar un cable pero no atendió todas las plegarias. Así que no nos salvó ni Dios, pero eso sí, fue bonito mientras duró. Ahora toca aguantar la cuarta plaza liguera y vernos en Europa en su máximo torneo.
.- Por Patxi Arteta, Periodista