Leyes del fútbol (I): las palabras, mejor sobre el verde
Antoine Griezmann, delantero del Atlético de Madrid -al menos por el momento, no será portada este sábado, ni este domingo, ni -probablemente- este lunes. La vuelta de LaLiga Santander no le llevará a portadas, su partido ante el Alavés estuvo lleno de intentos y errores, de 'casis' y no de goles. Su partido en Mendizorroza cerró una semana que nadie habría firmado: rumores, críticas y portadas... menos acierto.
Sus actuaciones con Francia sí correspondían con su figura, su sueldo y su valor. Anotó dos golazos y volvía a Madrid con la sensación de haberlo dejado todo solucionado tras su última comparecencia: "Estoy harto de rumores, todos los veranos es la misma historia", explicaba.
Simeone, gestor excelente de emociones y sensaciones, le ayudó en sala de prensa y casi rezó por tener su mejor versión este sábado. "Estoy seguro que él va a responder y va a rendir como siempre. No imagino un Atleti sin él, es el capitán y lo ha dado todo siempre por este escudo".
Pero Griezmann no estuvo acertado.
Anotaron Diego Costa -que se fue lesionado-, Álvaro Morata e incluso Correa (anulado), pero él no lo hizo. Tuvo una preciosa ocasión pero Pacheco no le dejó sonreír. Sus intentos no encontraban portería y cada minuto que pasaba era una piedra en su mente.
El técnico argentino decidió quitarle del verde a falta de un cuarto de hora. Se entregó al máximo, como de costumbre, se ofreció, acompañó en ataque y lo intentó hasta el final. Pero no acertó. No fue suficiente para silenciar las dudas.
Por suerte para el aficionado colchonero, Griezmann conoce la profesión y sus leyes. Con poco más de un mes de competición aún por delante, el francés deberá centrarse en cumplir con la máxima: el aficionado no quiere declaraciones ni promesas de amor, no quiere historias, quiere goles y rendimiento. Como hasta ahora lo ha mostrado. Con ello será suficiente para volver a lo más alto.
Por su bien y por el del Atleti.
