El once de Simeone para el Atlético-Real Madrid: diez fijos y una gran duda
Derbi en el Metropolitano con LaLiga Santander en juego. El Atlético de Madrid recibe al Real Madrid como líder y consciente de que tiene una oportunidad de oro para dar un golpe en la mesa de cara al título. Diego Pablo Simeone ha ensayado a lo largo de la semana su once ante el conjunto blanco, en el que sólo parece tener una duda.
El miércoles, Simeone probó un primer once. El jueves, otro distinto con una única variación. El viernes trabajó a puerta cerrada en el Metropolitano para no dar la pista definitiva de cara a su alineación, en la que sí parece claro que hay diez jugadores fijos.
El plan de Simeone en el derbi
Jan Oblak estará bajo palos y el esquema es uno de los temas a tratar. De primeras, el argentino podría apostar por un 4-4-2 con mucha versatilidad, capaz de transformarse en un 5-3-2 más habitual esta temporada e incluso en un 5-4-1 en fase defensiva, dependiente de las circunstancias.
Atrás regresará por fin Kieran Trippier, una vez superada la sanción. Giménez sigue lesionado, por lo que la zaga la completarán Stefan Savic, Felipe Monteiro y Mario Hermoso, con la opción de que este último actúe como central zurdo o como lateral, aunque con menos profundidad.
En la medular, Koke Resurrección y Marcos Llorente tienen su sitio asegurado, así como Yannick Carrasco por la izquierda. El belga actuará como extremo o carrilero, dependiendo de cada momento del partido. Y a priori, Ángel Correa también se postula como titular para partir desde la banda derecha, incorporándose en ataque pero también haciendo las coberturas a Trippier en su costado.
Arriba estará Luis Suárez, de eso no hay duda. Y queda una última plaza en el once que es la que más incertidumbre genera. Simeone probó primero con Saúl para completar la alineación, lo que motivaba que Llorente y Correa jugaran en sitios más ofensivos. Luego, en sus pruebas, dejó en el banquillo al ilicitano para poner a Joao Félix de inicio acompañando a Suárez. Es ahí, entre Joao y Saúl, donde reside a priori la única duda del once.