El Atlético de Madrid se hace viejo. La política reciente de fichar jugadores veteranos que llegan con la carta de libertad ha envejecido la edad media de una plantilla que sólo tiene a tres jugadores menores de 25 años: Samuel Lino, Rodrigo Riquelme y Pablo Barrios. En el lado opuesto, hasta diez futbolistas acabarán el presente curso con 30 años o más, lo que implica un problema a corto y medio plazo en un club que, a tenor de los últimos acontecimientos, no anda demasiado bien en términos económicos para fichar.
Cuando acabe el presente curso, Witsel tendrá 35 años y Azpilicueta estará a punto de cumplirlos. Savic y Griezmann cumplirán 33 años en los primeros meses de 2024 y Koke, 32. Además, tanto Morata como Oblak alcanzarán los 31 años de edad en los próximos meses.
Memphis Depay, Rodrigo de Paul y Reinildo Mandava acabarán el curso con 30 años. Una edad ideal para competir, en teoría, pero que también se traduce en un futuro que irá a menos en términos físicos y competitivos.
Javi Galán, Saúl, Giménez, Marcos Llorente, Correa y Mario Hermoso cumplirán 29 años en los próximos meses, Soyuncu y Grbic acabarán la temporada con 28 años y Nahuel Molina alcanzará los 26 años en abril. Este grueso de futbolistas marca la edad media de un equipo con poca juventud y muchos veteranos.
¿Y los contratos? Pese a sus edades, muchos jugadores gozan de buenas nóminas y contratos largos. Azpilicueta y Savic tienen firmada una renovación automática de fácil cumplimiento si se dan ciertos requisitos. Grbic, Koke, Hermoso y Witsel son los otros futbolistas que acaban contrato en 2024, con el capitán señalado como prioritario para renovar junto a Simeone.