(5-1) Manita al convidado a la fiesta

Y eso que la salida al campo de los de Jose era esperanzadora. Un tiro de Óscar Pérez y un córner que se paseó por boca de gol fueron la antesala de un fallo defensivo de Baquero que puso el 1-0 en el campo. Un resultado que obligaba al Cádiz a marcar cuatro goles, pero a partir de ahí el Castilla se hizo dueño del partido. Los merengues desaprovecharon incluso un falso penalti de Camille a Joselu que falló el ariete lanzando fuera. Un espejismo de resurgir cadista que rompió Mosquera con un golazo de falta directa por toda la escuadra que ponía el 2-0. El partido se acabó ahí, minuto 38.
El resto fue un quiero pero no puedo. Moke, Dioni y Juanse entraban en el campo, y al menos dieron otro ánimo al Cádiz tras reafirmarse que Cases está completamente negado en juego y gol.
Joselu en jugada personal conseguía el 3-0 a los 56 minutos para mejorar la fiesta. Dioni pudo maquillarlo pero su tiro raso dio en el palo en el minuto 66, pero lo hizo David de Coz en una falta ensayada de Juanse para el lateral que fusilaba por bajo la portería de Jesús. Pero la fiesta iba a ser más para el cuadro de Alberto Toril cuando en el minuto 80 Mosquera a puerta vacía marcaba el 4-1 tras no pitar el colegiado una falta clara sobre Juanse. Y para colmo Morata se sumaba a la fiesta consiguiendo en el 83 el 5-1 tras un pase de Denis.
Al Cádiz no le queda otra que levantarse y pensar en su próximo rival en la segunda eliminatoria. Ponerse una venda en los ojos no sirve de nada. Los amarillos deberán reaccionar a este duro golpe porque el ascenso sigue al alcance de la mano.