Empate de mérito de un Cádiz que recupera su sello

El Cádiz no pudo pasar del empate ante el Lugo. Fue uno de tantos encuentros en los que los locales se pusieron por delante, pero en esta ocasión no pudo aguantar las acometidas de un buen rival y tuvo que conformarse con el punto, que incluso supo bien tras la expulsión de Garrido.

Desde los primeros compases del partido se vio que iba a ser complicado porque el rival estaba muy bien plantado y se le veía con calidad en todas sus líneas. La iniciativa la llevaba el conjunto gallego y al Cádiz le costaba mucho recuperar el balón tras las pérdidas.
El primer disparo del partido sería del Cádiz, pero sin peligro. Aitor, la gran novedad en el once en el lugar de Álvaro García, lanzó  muy alto en el minuto 9. Tenía una gran oportunidad y se le vio muy activo en todo momento. Pasado el primer cuarto de hora el equipo amarillo empezó a entrar más en contacto con el balón, pero le costaba mucho encontrar huecos en la zaga visitante.
Era un partido de mucho respeto y de pocos espacios. Ninguno le regalaba un centímetro al otro y en la primera parte no había continuidad en el juego por parte de ninguno de los dos. El Cádiz se acercaba a balón parado y creaba cierto peligro, al igual que el Lugo a través de las internadas de Kravets, pero los porteros eran meros espectadores. La única excepción, un disparo fuerte pero muy centrado de Brian en el minuto 17.
Como casi siempre, el Cádiz perdía a un jugador por lesión. Era en el minuto 36 y Abdullah tenía que pedir el cambio y salía Eugeni. Un obstáculo más para superar a un rival de armas tomar. El primer gol pudo caer al filo del descanso tras un gran centro de Salvi, pero el disparo de Aitor lo desvió un defensa cuando ya se cantaba el gol en el Carranza. El primer tiempo se cerraba con otra buena ocasión de Álex, pero su centro chut se marchó fuera por poco.
La segunda parte comenzó con susto porque Brian tuvo que realizar un despeje muy comprometido tras un centro de Fede Vico. El Cádiz había acabado con buenas sensaciones la primera mitad, pero no había sido capaz de adelantarse y le tocaba sufrir. Sin embargo, el equipo se ha reforzado en enero con músculo y calidad y Eugeni lo demostró en el minuto 52 con un golazo desde fuera del área.
El partido se ponía justo como más le gusta al Cádiz. El Lugo ya había enseñado los dientes tras el descanso, pero ahora tenía que destaparse un poco más y eso le podría beneficiar a los locales. El balón era del equipo lucense, que no inquietaba especialmente. El Cádiz, por supuesto, esperaba para matar el partido a la contra.
Pero los problemas no acabarían con la lesión de Abdullah. Brian también tuvo que pedir el cambio en la segunda parte y Cervera dio entrada a Villanueva en su lugar. Otro cambio obligado que condicionaba el equipo cuando todavía quedaban 20 minutos para el final.
El Lugo iba con todo hacia arriba y el Cádiz tenía sus opciones. Tuvo una buena contra en el minuto 76, pero un defensa despejó un centro de Salvi cuando Carrillo ya se relamía para rematar. Una vez más, se entraba en el tramo final con el Cádiz por delante, pero con el riesgo de un gol del rival. Cifuentes hizo una excepcional parada a remate de Romero en el minuto 82 cuando parecía que llegaba el empate. 
Y terminó llegando en un córner en el que los lucenses estuvieron más vivos para encontrar un inesperado remate en el segundo palo. La cosa se complicó todavía más cuando Garrido fue expulsado en el minuto 89 por doble amonestación. Hasta ese momento el punto sabía a poco, pero ya con 10 el empate había que darlo por bueno. 
Al final tuvo una gran ocasión por mediación de Salvi, pero llegó muy justo de fuerzas y su disparo le salió muy flojo y al centro de la portería. Nada que reprochar a un Cádiz que recuperó sus señas de identidad, aunque en esta ocasión no se pudiera llevar los tres puntos.