Partido grande para dar el salto
Difícil que un partido tenga más alicientes que el Cádiz-Málaga de este lunes. Está claro que ni la hora ni el día son los mejores, pero la situación del equipo amarillo ilusiona mucho a su afición y sólo se puede esperar un gran ambiente para recibir a un rival directo para acabar entre los seis primeros. En el inicio de la Liga parecía que el conjunto malaguista iba a estar un escalón por encima, pero la realidad de la competición hace que ahora esté la cosa muy igualada.
Ganar este partido sería un empujón anímico espectacular porque supondría sacarle cinco puntos al Málaga y estrechar muchísimo la pelea que más interesa al Cádiz. Pero para conseguir eso habrá que pelear mucho ante un rival que se ha revitalizado con la llegada de Víctor a su banquillo.
En la primera vuelta fue un encuentro sin un claro dominador y que se terminó decantando por la lamentable actuación del colegiado Trujillo Suárez, que perdonó al Málaga un penalti en su contra y una expulsión. Bien estaría que el karma le devolviera algo al Cádiz esta noche de lunes, en un momento especialmente delicado de la temporada.
Llega el conjunto gaditano con Manu Vallejo, que es un jugador fundamental porque incluso en sus días menos inspirado siempre es capaz de sumar. Cuenta con la pareja preferida por Cervera en el centro del campo, Garrido y José Mari, y tiene en perfecto estado a Machis. Con eso y con la intensidad que se le presupone a este equipo, hay muchas esperanzas en sacar adelante el partido.
La gran duda radica en saber si apostará por el once que venía funcionando últimamente, con Aketxe junto al trío Jairo, Vallejo y Machis o si apostará por un delantero puro del estilo de Lekic o Jovanovic.
En el Málaga, en principio, no se esperan muchos cambios en el once. Víctor parece haber encontrado un equipo sólido de inicio, aunque sí está claro que no podrá repetir. No estará disponible Fede Ricca, con un esquince en el tobillo. Parte con ventaja para sustituirle Diego González, pero hay alguna opción más. La defensa la completan Cifu, Lombán y Pau Torres. En la portería, Munir. De ahí en adelante, el madrileño tiene disponibles a los mismos que usó ante el Alcorcón y el Mallorca de inicio. N'Diaye y Keidi Bare en la sala de máquinas, con Renato Santos y Ontiveros en las alas. El marbellí es ahora la punta de lanza, el técnico le dio galones para ofrecer vértigo. Arriba, Adrián por detrás de Blanco Leschuk.