La visión de Cádiz y del cadismo de un periódico australiano: "Es una ciudad carnavalesca"
El fichaje de Awer Mabil por el Cádiz ha provocado un gran interés en los medios de comunicación de Australia. Optus Sport es una plataforma deportiva que ha hecho un reportaje sobre la ciudad que va a acoger a su compatriota, en la que hace hincapié en cómo se vive el fútbol en una afición tan especial como la cadista.
"Sólo hay una estatua fuera del estadio Nuevo Mirandilla de Cádiz y no es de un exjugador, entrenador o incluso presidente. En cambio, está dedicada a los fanáticos del club", afirma sorprendido Graham Ruthven, el periodista que firma el reportaje.
"Mabil expresó su ilusión por jugar ante la afición del club en su presentación y tiene razón al sentirse así. La mayoría de los aficionados al fútbol en España tienen algún tipo de afinidad por Cádiz, al menos en algún nivel. Son los favoritos de los neutrales", destaca.
Cuando se refiere a la ciudad, dice que "Cádiz es una ciudad carnavalesca (el Carnaval de Cádiz es el carnaval más grande de España y se caracteriza por su carácter subversivo) con una actitud liberal que impregna a todos los que la habitan. Este espíritu se extiende al club de fútbol".
Tiene claro que el Cádiz es "uno de los clubes más idiosincrásicos del fútbol español" y señala que el cántico "vinimos aquí para emborracharnos y el resultado no importa en absoluto debería adaptarse a Mabil, un jugador capaz de producir momentos de brillantez explosiva mientras sonríe".
Goles y algo más
En lo meramente futbolístico ensalza que "ningún jugador del Cádiz llegó a las dos cifras en goles la temporada pasada y se espera que Mabil también cargue con su peso en este sentido".
Pero termina diciendo que en Cádiz se valora algo más que el rendimiento en el campo: "Hay un criterio diferente en el Cádiz. Su éxito o fracaso lo determinará la afición que hace del club lo que es, y que quiere ver algo más que buenos jugadores de amarillo y azul. Quieren jugadores que entiendan por qué el Cádiz es tan especial".
