La odisea del Tenerife en una semana: más de 3.000 kilómetros para jugar tres partidos
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Jugará contra el Alfaro en Copa del Rey
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De Ferrol a Tenerife pasando por Madrid y Zaragoza
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El fútbol español tiene una particularidad con las Islas Canarias. Un viaje que muchos equipos marcan en rojo por la distancia y la organización que se requiere. Pero hay un problema, nadie piensa en los equipos canarios, quiénes cada semana tienen que realizar viajes con mucha distancia que carga a los jugadores.
Uno de estos casos es el Tenerife, que esta semana tendrá una odisea con tres partidos que disputar, dos de LaLiga Hypermotion y uno de la Copa del Rey. Una semana en la que el equipo, que se encuentra penúltimo de la clasificación, tendrá que recorrer miles de kilómetros.
La odisea del Tenerife con más de 3.000 kilómetros
Todo comenzó este lunes con el partido de LaLiga Hypermotion ante el Racing de Ferrol. El Tenerife empató a uno con el equipo gallego, dejando luego la ciudad para dormir en A Coruña. Alrededor de unos 53 kilómetros separan una ciudad de la otra.
Sin casi tiempo para descansar, los jugadores entrenados por Pepe Mel marcharon en avión a el Aeropuerto de Madrid Barajas, unos 600 kilómetros de distancia. Ya en la capital española, los tinerfeños viajaron a la Ciudad Deportiva de Las Rozas para entrenar, otros 30 kilómetros.
No durmieron en esa ciudad sino que se fueron a Alcorcón a descansar, sumando otros 25 kilómetros más. De la ciudad madrileña volvieron a el Aeropuerto de Madrid Barajas, dónde cogieron un avión para asistir a Zaragoza. Un total de 334 kilómetros en avión.
🏟️ El @CDTOficial jugó ayer en Ferrol
🏨 Durmió en A Coruña
🛬 Aterrizó hoy en Barajas
⚽️ Entrenó en Las Rozas
😴 Duerme en Alcorcón
🚞 Mañana va a Zaragoza en AVE
🏆 El jueves juega en Alfaro
🏠 Llega a casa el sábado y juega en el Heliodoro el domingo
pic.twitter.com/XvLurG6z4y— MANOJ DASWANI 🏴 (@mdaswani) October 29, 2024
En la ciudad maña cogerán un autobús y viajarán a Alfaro, en dónde disputan su partido de la Copa del Rey este jueves. Ya con el partido terminado, los jugadores regresarán a casa el sábado, con la intención de jugar en el Heliodoro ante el Mirandés. Sin duda, una odisea de viaje que les hace acumular entre 3.000 y 4.000 kilómetros en apenas una semana.
