La revolución del Valencia empieza en Vigo

No pasa ni una semana en la que algún miembro de la plantilla del Celta suene en la ciudad del Turia. El mal momento del equipo valencianista hace que la próxima temporada se plantee como una revolución. Desde la secretaría técnica se cree que al equipo le faltan hombres con experiencia, con peso en el juego y tal como publica la prensa valenciana parece que siempre acaban encontrando eso en Vigo.

Primero fue Cabral, que el argentino sea el líder de la zaga del quinto clasificado de la Liga y acabe contrato es motivo suficiente para que muchos equipos pregunten por su situación, y por supuesto el Valencia está en esa lista. Luego llegó el rumor del interés de los che por Orellana al que ven como el mediapunta con el que reconducir su juego.
En el caso de Orellana, su especial carácter sumada a su elevada clausula hacen que la operación parezca muy complicada de llevar a cabo, y en el caso de que ésta se llegase a producir el Celta cobraría una importante suma de dinero con el que buscar un sustituto de primer nivel.
Pero la lista de deseos valencianistas no se acabó en estos dos jugadores, ya que también han preguntado por la situación de Eduardo Berizzo, que acaba contrato con el Celta de Vigo y tiene uno de los sueldos más bajos de la categoría, la repercusión del estilo de juego del Celta, hacen que su entrenador sea una pieza muy codiciada por clubes como el Atlético de Madrid que duda de la continuidad de Simeone.

El cuarto nombre

Parecía que con tres llegaba, pero no, el último nombre que ha sonado en Valencia, tal como señala Atlántico Diario,  es el de Pablo Hernández, el chileno ha sido un jugador que  se ha tenido que ganar poco a poco a la grada, se le vendió como el relevo de Rafinha, a lo que se unió su llegada lesionado al Celta, provocó un cierto rechazo por una parte muy importante de la afición, pero en este curso se ha convertido en un miembro fundamental del equipo, manteniendo vivo al grupo en muchos partidos gracias a su entrega y lucha. El problema para el Celta sería muy grave, ya que desde Chile señalan que el 'Tucu' sólo tiene 3 millones de clausula de rescisión.
Lo único cierto de todo esto es que la afición del Celta va a tener que saber sobrellevar los continuos rumores sobre el interés por sus futbolistas, y es que esto es uno de los efectos más inmediatos que tiene el éxito en el mundo del fútbol.