Nueve jugadores del Celta B, pendientes de la decisión del club

Una de las grandes asignaturas pendientes de la gestión de la directiva presidida por Carlos Mouriño es la gestión del segundo equipo, el filial céltico lleva años deambulando por la zona baja de la Segunda División B sin que haya visos de mejora a corto plazo.

 
En la cabeza del máximo dirigente celeste sigue la idea de subir al Celta B a Segunda División en un par de temporadas, con los mimbres actuales eso es materialmente imposible a no ser que lleguen fichajes de nivel descuidando a la cantera hasta que se logre ese objetivo. Lo cierto es que los equipos juveniles no han realizado tampoco una buena temporada y salvo casos excepcionales como Brais Méndez, parece complicado que muchos de esos jugadores acaben en el Celta B.
El filial va a sufrir una profunda, muchos de sus jugadores acaban contrato o ya están en una edad inadecuada para seguir formando parte de un equipo B. Jonathan de Amo tiene 26 años y acaba contrato, Lucas Olaza termina su cesión de dos temporadas por parte de River Plate de Montevideo y su rendimiento ha ido a menos, Fragapane también concluye su cesión de Boca Juniors, Adri Cuevas tiene cuatro años opcionales por parte del club pero con 26 años y fichado en el mercado invernal para salvar al equipo no parece que el Celta vaya a apostar por su continuidad. Lo mismo con Guille Andrés, procedente del filial del Pucela y que no ha rendido al nivel deseado anotando sólo 4 goles este curso.

Goldar, Iglesias, Kevin y Domínguez cuentan con más opciones

Ninguno de estos cinco jugadores tiene muchas posibilidades de seguir. Pero hay más jugadores que acaban su relación con el Celta el próximo 30 de junio, el primero de ellos es el capitán Kevin, que con 23 años deberá subir al primer equipo o renovarle para darle una cesión en Segunda. Su comportamiento en el campo ha sido más que notable y cualquiera de las dos opciones sería viable. Otro de los veteranos que puede contar es David Goldar, el central ya ha debutado con Berizzo en el primer equipo y lo más seguro es que se le encuentre acomodo en forma de cesión para que continúe su evolución pues aún tiene 21 años.
El caso más complicado es el de Borja Iglesias, este verano pasado se le prometió que iba a ser el tercer delantero del primer equipo y salvo unos minutos en Copa, acabó jugando toda la temporada en el filial. Ha demostrado que la categoría de bronce se le queda muy pequeña y el club deberá estudiar si lo renueva para quedarse en el primer equipo o le busca una cesión en Segunda División, ya que otra temporada más el compostelano ha sido el máximo realizador del Celta B.
Por último, el club aún no se ha puesto en contacto con Borja Domínguez, el Celta puede renovar de forma unilateral su contrato, al mediocentro no le faltan novias en Segunda tras su espectacular temporada en el Racing de Ferrol. Estos son, a mayores de los posibles fichajes, los nueve frentes abiertos que tiene la directiva y Felipe Miñambres en el segundo equipo celeste, nueve jugadores que conocerán su futuro, como muy tarde, el próximo 30 de junio.