Las traídas de aguas quieren seguir negociando con el Celta
La Comunidad de aguas de Petelos-Tameiga desestimó el proyecto actual de la ciudad deportiva del Celta en su asamblea general de este domingo. Sin embargo cuatro de las seis traídas de aguas votaron en un segundo punto seguir negociando con el club para conseguir mejoras con las que llegar a un acuerdo definitivo.
De las seis traídas de aguas sólo dos están directamente afectadas por el proyecto del Celta, Monte Baixiña, en Tameiga y Campo de Eiró, en Pereiras. Ambas votaron a favor del segundo punto en el que se insta al Celta a ofrecer mejoras para seguir negociando. Junto a ellas también votaron a favor este punto Casalmorto y Roublin, ambas sitas en Pereiras.
Dos de las traídas de aguas rechazaron de plano la construcción de la ciudad deportiva así como seguir negociando con el club vigués. Petelos y Casal-Tameiga no quieren que la ciudad deportiva, con su estadio y área comercial pueda afectar de manera indirecta a sus recursos acuíferos.
Ante este situación, con el rechazo total al proyecto inicial, tanto por parte de la Comunidad de Montes de Tameiga así como de la Comunidad de aguas de Petelos-Tameiga, el Celta sólo puede seguir adelante con las infraestructuras proyectadas en Pereiras.
En ellas se construirán tres campos de entrenamiento para el primer y segundo equipo así como una serie de edificios que sirvan de apoyo para el día a día deportivo de estos dos equipos. El resto del proyecto diseñado por Irisarri para el Celta está en el alambre.