Augusto explica su salida traumática del Celta
Augusto Fernández dejó el Celta de Vigo en enero de 2016. Su salida, al Atlético de Madrid, tras cuatro años vistiendo la celeste y siendo capitán, causó estragos en la ciudad olívica y, aún hoy, cuando su carrera le ha llevado a la Superliga china, el centrocampista argentino sigue dando explicaciones.
En una entrevista concedida este jueves al programa 'Aocontrataque' de Radio Galega, Augusto volvió a mencionar que dejar al Celta fue más complicado de lo que el celtismo piensa.
"Mis niñas nacieron ahí, Vigo siempre estará marcado en mi vida más allá del fútbol", resaltó. El Atleti pagó la cláusula de rescisión del futbolista para hacerse con sus servicios y Augusto se vio de pronto jugando la Champions League y viviendo un regreso a la selección argentina.
"A mí, con 29 años, me apareció un club como el Atlético de Madrid. Hice lo correcto. En lo deportivo me salió bien porque a los tres meses estaba de vuelta en la selección, ya que hacía un año y medio que no iba. Al tiempo me encuentro jugando los partidos decisivos de Champions contra el Barcelona o el Bayern de Munich, incluso llegué a jugar la final de la Champions", recordó Augusto.
Augusto: "El Celta tiene una parte de mi corazón, tanto en lo futbolístico como en la vida, que me ha marcado"
Prosiguió recalcando que, durante la temporada 2016/17, pudo volver a colocarse la albiceleste. "Me citan para la Copa América con Argentina y la juego toda. Por eso considero apropiado lo que hice al margen de que sé y asumo que a mucha gente no le gustó", reconoció el argentino. No obstante, insistió en que no tuvo la oportunidad de controlar eso. "Pero eso no lo puedo manejar, lo que sí puedo manejar es el respeto y el aprecio y lo que aliento por el Celta cada vez que los miro".
Augusto y su cariño por el Celta
"Valoro mucho al Celta, me doy cuenta cuando estoy viendo un partido y me encuentro haciendo fuerza por el Celta en sí, independientemente de que hay muchos chicos nuevos que no conozco. El Celta tiene una parte de mi corazón, tanto en lo futbolístico como en la vida, que me ha marcado. Mis dos hijas son viguesas y siempre tendré un rinconcito para Galicia en mi corazón", resaltó, orgulloso de su etapa celeste, Augusto Fernández.
Y es que, a pesar de vivir en China, donde ahora pelea por los intereses del BJ Renhe, ve todos los partidos del Celta. "No me pierdo un partido, en China teniendo a Edu (Domínguez) -expreparador físico celeste- y a su hijo, que son muy celtistas, no paramos de hablar del Celta", concluyó.