Así fue el primer día de cole de Wesley Hoedt
La expulsión de Wesley Hoedt frente al Real Valladolid el día de su debut ha empañado su actuación a nivel futbolístico. El central neerlandés, recién llegado a la disciplina gallega, no se ha estrenado de la manera más deseada. Ahora, tras la vorágine, cabe preguntarse cómo le fue al defensa en el primer día con el Celta de Vigo.
Hoedt compartió el eje de la zaga con Néstor Araújo. En principio, dos centrales expeditivos y contundentes. En los primeros veinte minutos, con el Celta aglutinando balón, el Valladolid no encontró espacios para transitar. La línea defensiva, muy adelantada, permitió que el jugador se mostrara imperial al corte. También destacó con el juego aéreo, donde ganó los cinco duelos aéreos que disputó.
Solvencia en la salida de balón
Además, cuando el Celta tuvo el balón, fue el principal foco en la salida desde atrás. El holandés las sacaba todas desde atrás, se atrevió a batir líneas de pase y dejó alguna conducción hasta zonas del medio campo. Fue el segundo jugador que más balones tocó en el Celta con 63 toques, solo por debajo de Brais Méndez con 67. Tuvo un reseñable 86% de precisión en sus pases, tanto en corto como en largo. De hecho, a la hora de los desplazamientos de larga distancia, dejó varios cambios de orientación hacia Hugo Mallo. También lanzó al equipo a la contra jugando para Maxi Gómez, que recibió varios balones de espaldas y los jugó para Boufal y Sisto.
Por otra parte, en la segunda parte Hoedt se vio mucho más expuesto. Con los laterales celtistas proyectados, el central vio cómo lo encaraban una y otra vez. Guardiola, Óscar Plano y Keko encontraron muchos espacios a su espalda en la segunda mitad. Una y otra vez le buscaron las cosquillas en ese carril, y entre las habilidades de Wesley no se encuentran la velocidad o la capacidad para girar. Con sus 1.92 metros, es un central ciertamente rígido y lento. Si bien los centrales modernos son duchos a la hora de recuperar en carrera hacia su propia portería, esa no es una de las habilidades del holandés.
Las tarjetas, torpezas en situaciones límite
Sobre las tarjetas recibidas, en la primera Hoedt se ve obligado a realizar una falta táctica tras meterse él mismo en un lío. La segunda es más rigurosa, al sancionar el árbitro con amarilla un supuesto manotazo en la cara. En la repetición, sin embargo, no termina de quedar claro si este se produce. No obstante, la torpeza fue castigada y el Celta se quedó con uno menos durante los últimos minutos.
En definitiva, el primer día de Hoedt como celtista tuvo luces y sombras. Queda claro que el jugador atesora unas cualidades y una clase que mejoran lo que había. De hecho, el jugador mostró muchas de las credenciales que No obstante, también posee ciertas carencias. Si bien son incompatibles con algunas de las pautas de juego de este Celta, son fácilmente subsanables desde la pizarra.