Dolor y gloria en el Coliseum: lucha por la salvación y la Champions
El Getafe CF, inmerso en su pelea por la Liga de Campeones y con el horizonte de la eliminatoria que tiene que disputar ante el Inter de Milan, peleará por mantener su estatus en la zona noble de la tabla con el Celta de Vigo, necesitado de puntos para no caer en el descenso y mermado por la ausencia de su hombre clave, Iago Aspas.
Después de 26 jornadas y en el último tramo de la Liga, los hombres dirigidos por José Bordalás mantienen intacto su sueño de terminar el campeonato entre los cuatro primeros clasificados. No quieren ceder su actual cuarta plaza para seguir en la lucha por la ansiada Liga de Campeones.
Su última victoria, 0-1 en Mallorca el pasado fin de semana con un gran gol del serbio Nemanja Maksimovic, corrigió las dos derrotas consecutivas frente al Barcelona (2-1) y el Sevilla (0-3) con las que el Getafe pareció bajar de la nube en la que vivía inmerso en la Liga.
Esos tres puntos trajeron un punto de tranquilidad en un club que no puede vivir en el mismo estado de felicidad en la Liga Europa. La crisis del coronavirus afectará de lleno al Getafe, cuyos aficionados, si no hay un milagro, no podrán disfrutar de dos de los partidos más importantes de la historia del club.
Es inevitable que el choque ante el Inter eclipse al del Celta, pero los aficionados azulones no pueden evitar lamentarse por la imposibilidad de viajar primero a Milan a ver a su equipo y por la más que probable obligación de que el choque de vuelta en el Coliseum Alfonso Pérez sea a puerta cerrada.
Pero mientras se desarrollan esos acontecimientos y se toman decisiones, José Bordalás sólo piensa en el duelo ante el Celta. El técnico alicantino espera máxima concentración en sus jugadores para conseguir tres puntos vitales en sus aspiraciones europeas.
Éstos viven en un gran estado de felicidad gracias a las buenas noticias. Primero, porque Xabier Etxeita podrá jugar en el centro de la defensa después de que el Comité de Competición retirase la quinta tarjeta amarilla que recibió en Son Moix.
Segundo, porque volverán al once hombres clave como Marc Cucurella o el camerunés Allan Nyom, sancionados el pasado fin de semana. Y, tercero, porque los uruguayos Damián Suárez y Mauro Arambarri están eufóricos después de que su seleccionador Óscar Tabárez les incluyera en la primera lista de convocados para los encuentros ante Chile y Ecuador clasificatorios para el Mundial de Catar.
En el capítulo de malas noticias, Bordalás tendrá que afrontar la ausencia de David Timor, con problemas en un pie y uno de los sustitutos habituales de Arambarri y de Maksimovic. El marroquí Fayçal Fajr o Francisco Portillo, ausentes en las últimas convocatorias, podrían ocupar su lugar en la convocatoria. Además, Mathías Olivera sufre unas molestias físicas que podrían dejarle fuera de la lista, aunque su entrenador confía en poder contar con el uruguayo.
Será otra exigente prueba para un Celta que atraviesa su mejor momento tras perder únicamente uno de sus últimos ocho partidos de Liga, sobre todo porque enfrente está un rival que sueña con alcanzar uno de los puestos de Liga de Campeones.
La baja de Aspas es un serio contratiempo para Óscar García Junyent. Sin el internacional español, el Celta pierde a su máximo goleador, además de, junto a Rafinha Alcántara, al futbolista más desequilibrante de su plantillla.
Los números, por si fuera poco, tampoco acompañan: el conjunto celeste perdió 19 de los 28 encuentros que jugó sin el atacante gallego, que podría ser suplido en Getafe por Santi Mina, autor del gol del empate en el Santiago Bernabéu, o Pione Sisto.
Al centro del campo regresará el croata Bradaric tras cumplir sanción en Granada. Repetirá junto a Okay Yokuslu en el doble pivote. Rafinha, el motor del equipo en los últimos partidos, y Smolov también tendrán continuidad en el equipo titular.
La fortaleza y fiabilidad de l Getafe puede animar a Óscar García a recuperar la línea de tres centrales que tan buen resultado le dio en Mestalla y el Santiago Bernabéu. En ese caso, Aidoo reforzaría el centro del eje junto a Murillo y Araujo, con Hugo Mallo y Olaza en los laterales, derecho e izquierdo respectivamente.