Pione Sisto confiesa el racismo que sufrió de niño en Dinamarca

El diario danés Politiken ha publicado la segunda parte de una larga entrevista que Søren Lissner ha realizado a Pione Sisto, extremo del Celta de Vigo. En el primer capítulo reveló la depresión que sufrió durante el Mundial de Rusia. Este no es el único capítulo oscuro de su corta vida ya que en esta segunda parte confiesa los problemas de racismo que tuvo que soportar en su infancia por parte de los padres de sus compañeros de clase.

"Los padres de los compañeros de clase se quejaban indignados por el color de mi piel" llegando a prohibirle jugar al fútbol en algunas ocasiones por culpa de las quejas de esos padres. Pione Sisto confesó que "les escuchaba decir cosas como 'ahora juega a la pelota' y luego algo feo sobre el color de mi piel que no reproduciré".

Pione Sisto, que nació en Uganda en una familia que huía de la guerra, se crió desde niño en Dinamarca. El futbolista cree que el color de su piel era la causa de estos episodios racistas: "Solo porque no me parezco a la mayoría de los niños daneses. Me sorprendió que los padres actuaran así con un niño que era compañero de equipo de sus propios hijos", lamento Pione Sisto.

Si estos episodios de racismo marcaron buena parte de su infancia, las críticas y comentarios que los aficionados hacen de él en redes sociales también le han afectado mostrando su necesidad que querer mostrar una imagen perfecta de él: "Quería ser perfecto porque es lo que la gente muestra de sí misma en las redes sociales pero no puedo serlo".

"Durante gran parte de mi carrera, me sentí presionado en el campo porque estaba persiguiendo el reconocimiento en las redes sociales. Fue difícil, la gente trata de mostrar el defecto de los otros y el lado perfecto de sí mismos", continuó explicando el jugador del Celta de Vigo en una entrevista al Diario Politiken que recoge La Voz de Galicia.

Pione Sisto reconoce que se siente incómodo ya que tiene la sensación de que le "siguen con lupa" en cada uno de los partidos que juega reiterando de nuevo que "sé que no puedo ser perfecto, pero parece que los jugadores de fútbol deben serlo todo el tiempo, de lo contrario, te lo harán saber".

Pione Sisto, que quiso agradecer la ayuda que siempre tuvo de su hermano Angelo, también quiso desvelar algo que muchos futbolistas niegan, que es el estar pendiente de los comentarios que hacen de ellos los medios de comunicación y los aficionados: "En la mayoría de los casos es mentira cuando los jugadores dicen que no leen lo que se dice de ellos".