Coudet deberá ampliar su rotación ante un nuevo tramo de competición agotador
Eduardo Coudet ha cambiado al Celta de Vigo, el entrenador argentino suma cinco victorias, un empate y una sola derrota - su primer encuentro - en su corta trayectoria al frente del equipo. Para ello ha sacrificado varias piezas de la plantilla con las que apenas está contando, además de los canteranos que sí tenían minutos con el anterior técnico, Óscar García. Una dinámica que deberá corregir este mes de enero si no quiere agotar a una plantilla corta a la que le está exigiendo un esfuerzo físico olvidado por los últimos técnicos.
El Chacho ha construido un bloque en torno a poco nombres. Quitando la portería donde Rubén Blanco juega LaLiga e Iván Villar disputa la Copa del Rey el entrenador apenas concede minutos a una docena de futbolistas. En defensa las bajas han reducido las opciones a Mallo, Aidoo, Araujo, Murillo y Olaza. Si bien es cierto que el central ghanés salvo ante el Cádiz - donde fue titular por la sanción de Murillo - apenas ha jugado 62 minutos en cinco encuentros.
En la parte medular Renato Tapia, Nolito, Brais Méndez y Denis Suárez están completando todos los onces. Beltrán, Baeza y Okay son los otros futbolistas que están contando con oportunidades. El turco entra en el tramo final de los partidos, lo que ha llevado a estar algo menos de 90 minutos sobre el césped desde la llegada de Coudet. Baeza suma 125 minutos en los seis partidos que ha dirigido Coudet en Liga y Beltrán 140'.
En ataque la lesión de Santi Mina ha provocado que Brais Méndez y Nolito adelantasen su posición. Solo Aspas y el delantero vigués están contando para el argentino. A esta dupla se le puede sumar un recuperado Emre Mor que ya ha participado en el último encuentro ante el Getafe con 25 minutos.
Fontán, Gabri Veiga, Miguel Rodríguez y Lautaro De León son las piezas con las que puede contar en la Copa del Rey, ya que en enero se disputarán la segunda ronda, los dieciseisavos y los octavos de final. Si el Celta avanza en esta competición en la que se enfrentará al Ibiza deberá ser capaz de compaginar esfuerzos con LaLiga. El Huesca abrirá un calendario muy exigente el 30 de diciembre; el 2 de enero el Celta viajará a la capital de España para medirse al Real Madrid. Luego llegará el Villarreal a Balaídos el viernes 8 de enero. Aún sin horarios conocidos el Celta deberá medirse a Real Betis, Eibar y Granada.
En un mes los vigueses deberán afrontar seis encuentros de Liga y hasta tres partidos de Copa del Rey. Nueve partidos en poco más de 30 días. Esto obligará a Coudet a cambiar sus hábitos, mover más las piezas de su once y anticipar los cambios en los partidos si quiere que la plantilla no agote sus reservas de gasolina demasiado pronto.