El Celta peleará por complacer a Coudet y lograr que Cervi fiche en verano
El gran objetivo del Celta de Vigo en este mercado invernal que cerró el pasado 1 de febrero sigue en Lisboa. El Benfica se negó a traspasar a Franco Cervi cuando ya tenía un principio de acuerdo con la entidad celeste debido a la gran cantidad de bajas que ha provocado el coronavirus en su plantilla. Felipe Miñambres reconoció que el jugador seguirá siendo uno de los objetivos del Celta para reforzar el ataque la próxima temporada ya que es una petición expresa de Eduardo Coudet.
"Era Cervi o era Cervi", así de contundente se mostró el director deportivo en su última comparecencia para analizar el mercado de fichajes que realizó el Celta en enero. Miñambres reconoció que no había 'plan b' porque en la cabeza del club y de su entrenador, Eduardo Coudet, solo se contemplaba la opción de firmar al extremo argentino del Benfica.
El alto número de futbolistas contagiados en el Benfica obligó a Jorge Jesus, su técnico, a empezar a contar con Cervi. Hasta ese momento apenas había sumado 40 minutos en la Liga Nos. Sus actuaciones convencieron al entrenador luso y el Benfica cerró la puerta de salida de Cervi. El jugador buscó la manera de convencer a su actual equipo y lograr su llegada a Vigo, donde contaba con la plena confianza de Eduardo Coudet, que formó a Cervi en Rosario Central.
Este interés no va a cambiar en los próximos meses. El Celta sabe que para el Chacho Coudet la llegada de Franco Cervi es una absoluta prioridad. Es el número uno en la lista del técnico argentino. Cervi llegaría para ocupar la plaza de Nolito, que en junio acaba contrato y aún no se ha sentado a negociar su continuidad en el Celta. El gaditano cumplirá 35 años en octubre, de ahí que su presencia en el equipo vigués la próxima campaña no esté garantizada.
El Celta espera que los casos positivos por coronavirus en el Benfica vayan remitiendo y que Cervi vuelva a ser suplente en el cuadro lisboeta por detrás de Éverton, una de las estrellas de 'Las Águilas' y por el que pagaron 20 millones de euros al Gremio este pasado verano. De esta manera Cervi no subiría su valor en el mercado más allá de los ocho millones de euros que pactó en su momento el Celta con el Benfica, cuatro de ellos fijos y los otros cuatro por objetivos.
Para ello quedan aún muchos meses por delante, lo que llena de dudas la viabilidad de la que pretende el Celta que sea su contratación estrella para la temporada 2021/22. "Los compromisos se firman, pero si cambió en un mes pueden cambiar más en cuatro o cinco meses. Ellos saben que nosotros lo vamos a querer, pero él puede empezar a jugar y meter goles, falta mucho tiempo", explicó este miércoles Miñambres.