La cruda realidad con Emre Mor: "No va a ser fácil encontrarle destino"
A una semana para que arranque LaLiga Santander, el Celta de Vigo continúa sin dar salida a los dos futbolistas turcos que tiene en plantilla. Tanto Okay Yokuslu como Emre Mor deben abandonar el club antes de que cierre el mercado de fichajes y, mientras que hay confianza en el caso del centrocampista pese a que no se han recibido ofertas en firme por él, la situación es totalmente diferente en el caso del atacante.
Javier Maté, el portero con más partidos oficiales en la historia del Celta, ha hablado en los micrófonos de Radio Vigo dando por hecho algo que todo el mundo sabe, la dificultad para dar salida a Emre Mor: "El año pasado nos queríamos engañar un poco a principio de temporada. No se rehabilita de la noche a la mañana. Lo mejor que puede pasar es una salida pactada, pero no va a ser fácil encontrarle un destino", señalaba el actual director deportivo del Coruxo.
Declaraciones que muestran el pesar de todo el celtismo, apenas unos días después de que el último equipo que se había interesado en Emre Mor, el Trabzonspor vetara su fichaje. El comité técnico del club turco se reunía recientemente para evaluar la posibilidad de negociar la incorporación del atacante del Celta, tomando la decisión final de ni siquiera presentar una oferta al club olívico.
Se le acaban las opciones a un Emre Mor cuyo fichaje también había sido descartado anteriormente por el Besiktas, el Sivasspor y el Adana Demirspor. Mientras tanto, se entrena en solitario ya que el Chacho no quiere que forme parte de la plantilla celeste, y en palabras del propio futbolista, su agente, Mino Raiola, está "trabajando para llevarme a un lugar donde seré gran parte de un proyecto". El Celta espera impaciente pero el futuro de Emre Mor cada vez parece más lejos de Turquía.
Tanta paz lleve como tranquilidad deje
Envíenselo al Coruña como regalo, todo cuanto celtista existe estará agradecido de tal acción...
He de reconocer que siento gran debilidad y hasta una pizca de envidia por el Emre. Desde pequeños, al menos en generaciones pretéritas, se nos ha inculcado la errada filosofía del triunfador vital en función de determinados logros (materiales básicamente). Carrera, un buen puesto laboral y patrimonio eran condición indispensable para triunfar. Sin ello, sentíase el padre huérfano de recompensa al sacrificio de la crianza. Habrá quien diga que con millón y pico al año se hace más fácil sonreír, quien apele a la inmadurez, la inconsciencia o la ensoñación. Quien afirme que vive en un universo paralelo.. pero la única certeza es el estado de FELICIDAD permanente que envuelve al chico, impertérrito a la hostilidad del entorno. Y como NO hay más triunfo en la vida que ser feliz..!!