Javi Guerrero, otro enamorado del Celta de Claudio Giráldez: "No dejen de soñar"
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Javi Guerrero admira la propuesta de Claudio Giráldez
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Confía en las posibilidades del Celta
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Claudio Giráldez, ante las renovaciones de Alfon y Carreira: "Son jugadores de futuro"
El técnico del Celta de Vigo, Claudio Giráldez, cumple este miércoles un año al frente del primer equipo olívico. Al míster gallego no le ha temblado el pulso para apostar por el buen trato al balón y la cantera, un estilo con el que ha ganado muchos adeptos. Uno de ellos es el exjugador del conjunto celeste Javi Guerrero.
En declaraciones a MEDIASET, el exfutbolista ha reconocido que es un admirador del fútbol de Claudio Giráldez y le ha deseado tanto a él como al Celta de Vigo que "no dejen de soñar".
"Eso pasa siempre, el otro día el Getafe venía con una racha de tres o cuatro partidos y tabién estaban pensando en Europa. Creo que el Celta me quito el sombrero de la propuesta que tiene, por un entrenador que ha llegado y ha contado con la gente de la casa, que conocía a los chicos de categorías inferiores y ahí está el rendimiento", ha reconocido Guerrero.
Asimismo, ha añadido que "más allá de que saquen a jugadores de la casa, están haciendo una propuesta super bonita para el espectador y me alegro mucho de que esté ahí y ojalá consiga algo más, creo que hay equipos con más potencial ahora mismo, pero que no dejen de soñar que va a haber más posibilidades".
Claudio Giráldez y su llegada al Celta

Claudio Giráldez era la primera opción para suplir a Rafa Benítez, pero no la única. El joven entrenador llegaba avalado por su gran trabajo en el Juvenil y el Celta Fortuna. En ambos equipos fue moldeando a talentos como Hugo Álvarez, Javi Rodríguez, Damián Rodríguez, Hugo Sotelo o Fer López.
Tras el varapalo económico que supuso la destitución de Rafa Benítez el salario de Claudio Giráldez, que acababa contrato el 30 de junio, también se convertía en una razón de peso para su elección. Pocos minutos después de anunciar la destitución de Rafa Benítez se anunciaba su llegada hasta final de temporada.
Por delante tenía la misión de salvar al Celta del descenso. Partió con 24 puntos en 28 partidos. En 10 partidos sumó 17 puntos para lograr el objetivo en la jornada 37 venciendo 1-2 al Granada. Balaídos vivió la última jornada de Liga ante el Valencia con la tranquilidad de saberse salvado.