Claudio Giráldez invitó a Balaídos al aficionado del Rayo Vallecano que dio con una botella
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En la primera vuelta, Claudio pidió perdón a un aficionado que casi golpea tras patear una botella
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Le invitó al partido de la segunda vuelta para ver a su Rayo en Balaídos
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El partido entre el Celta de Vigo y el Rayo Vallecano tuvo una historia de perdón y redención que tuvo lugar en la grada de Balaídos. Y es que el partido de la primera vuelta tuvo un pequeño incidente, en el que Claudio Giráldez casi golpea a un aficionado con una botella de agua que previamente había pateado, fruto de la desesperación después de que su equipo fallase dos ocasiones seguidas a bocajarro. Un suceso por el que el propio técnico celeste se disculpó en persona con este hincha rayista, y también reconoció su error públicamente.
Ahora, SER Deportivos ha revelado que el entrenador celtista tuvo a bien invitar a este aficionado del Rayo Vallecano a un fin de semana en Vigo cuando jugara su equipo, un encuentro que ha acontecido el pasado fin de semana, y fue clave en la lucha por Europa. De este modo, este aficionado habría acudido a la ciudad tras la invitación de Claudio Giráldez para ver a su equipo. Además, tuvo la suerte de ver a los franjirrojos venciendo por dos goles a uno al club celeste.
🔙⚽ "En el #RayoCelta de enero, fruto del cabreo y la frustración, Giráldez pegó una patada a una botella que pasó a un centímetro de un aficionado"
👏🫂 "Lo buscó y, además de disculparse, le invitó a un finde en Vigo para ver el #CeltaRayo"
🎙 @PacojoSER, en @SERDeportivos pic.twitter.com/UCJRA6mGQ4
— SER Deportivos (@SERDeportivos) May 20, 2025
Las buenas palabras entre Claudio Giráldez e Iñigo Pérez
Del mismo modo, el encuentro tuvo un gran ambiente ya desde la previa. La afición celeste protagonizó un recibimiento espectacular al equipo en los aledaños de Balaídos. Del mismo modo, entre los dos entrenadores hubo un cariñoso intercambio de palabras y gestos tanto en la previa como en el post partido.
En este sentido, Iñigo Pérez elogió el juego del Celta de Vigo: "No empezamos bien, pero la primera parte está muy bien jugada por nuestra parte, hemos sido contundentes, que era algo que nos estaba faltando. En la segunda sabíamos que teníamos que defender bien el área porque el Celta, con su ADN, nos iba a someter. Hemos tenido que aguantar, y no es lo que más nos gusta, pero hay que saborear las victorias”, subrayó.
El entrenador del Rayo elogió el ambiente vivido en Balaídos: “Es de ponerte la piel de gallina, me encanta cómo han apretado y como nos han exigido, como hemos defendido en esa área en el que sólo veíamos camisetas celestes en el fondo”.
Ironizó con que le tiene ganada “la medida” a Claudio Giráldez y dijo estar convencido de que los tres equipos -Celta, Rayo y Osasuna- van a ir “a por el premio” de Europa en la última jornada. “Los tres nos lo merecemos”, afirmó.