Pelea entre cadetes del Real Madrid y el Celta de Vigo en pleno torneo

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El partido fue empañado por la trifulca
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El conjunto blanco se acabó llevando el trofeo
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La final del Torneo Ourense Provincia Termal de categoría cadete entre el Real Madrid y el Celta de Vigo debía ser una fiesta del fútbol base, pero terminó en escándalo. El partido, disputado en el estadio O Couto, acabó con una tangana multitudinaria entre los jugadores de ambos equipos que ha dejado imágenes lamentables, con puñetazos, empujones y tres expulsados. La victoria (2-0) de los blancos quedó en segundo plano ante lo ocurrido en los últimos minutos.
Un partido marcado por la tensión
El encuentro enfrentaba a dos de las mejores canteras del fútbol español. El Real Madrid llegó a la final tras superar al Athletic Club, mientras que el Celta hizo lo propio ante el Oporto. En el campo, el conjunto blanco fue superior y se llevó el título con goles de Bryan Bugarín y Matías Martín, ambos en la segunda parte.
Lo que debía ser una celebración del talento joven terminó empañada por una trifulca vergonzosa en los minutos finales.
Lea final no desenlace do @realmadrid @RCCelta no Torneo Ourense Provincia Termal
🟥 O partido rematou con 3 expulsados
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— En Xogo tvG2 (@EnXogo_tvG2) June 15, 2025
La pelea entre el Celta y el Real Madrid
Todo comenzó con un enfrentamiento entre dos jugadores, uno de cada equipo, que intercambiaron empujones. Tras la acción de un futbolista del Celta, varios jugadores madridistas se abalanzaron sobre él. El momento más tenso llegó cuando el portero del Real Madrid, en un acto fuera de lugar, golpeó por la espalda a un rival.

Las imágenes, recogidas por los compañeros de En Xogo de TVG2, muestran cómo varios jugadores se lanzaron al cuerpo a cuerpo. La situación se descontroló y obligó a la intervención arbitral, que acabó con tres expulsados y varias amonestaciones.
Una final empañada
El torneo cadete, de carácter internacional, contaba con la presencia de clubes como el FC Porto, Atlético de Madrid, Athletic Club o los anfitriones del Pabellón CF. El ambiente en las gradas había sido excelente durante toda la semana, y la final prometía ser el broche perfecto a una gran edición. Sin embargo, los incidentes protagonizados por los jugadores oscurecieron el desenlace.