Antonio Sivera ha sido uno de los protagonistas del Alavés-Villarreal de esta tarde. El conjunto del Coudet consiguió sumar una victoria importantísima en su lucha por salir del descenso, celebrada por todo lo alto por sus hombres, pero que dejó el susto en el cuerpo con el incidente protagonizado por el meta babazorro.
En el 50' del partido, el meta babazorro salió con todo para taponar la llegada de Ayoze, pero en la jugada se llevó un rodillazo del canario en la cabeza que lo dejó inconsciente. Abqar trató de colocarlo en posición lateral mientras que Ortiz Arias dio rápidamente la orden para que entraran las asistencias.
El juego estuvo detenido durante más de cinco minutos y todo quedó en un susto. Sivera se pudo reincorporar y salir de su propio pie del terreno de juego, aunque el colegiado, avisado por la sala VOR, fue a revisar la jugada y terminó mostrando la cartulina roja al meta.
Tras todo lo ocurrido, el portero fue trasladado a un hospital de Vitoria para someterse a más pruebas y desde allí ha subido una foto en su perfil de Instagram para agradecer a todos el apoyo.
"Una vez más... muchas gracias a todos por los mensajes... ya he pasado por quirófano y todo bien! Gracias equipo por ese esfuerzo tan grande para sumar 3. No nos vamos a rendir", escribió el meta desde la cama del hospital.
En la imagen compartida se puede ver a Sivera con un apósito en su mandíbula y en su labio inferior. El club babazorro informó de que el jugador albiazul permanecerá ingresado esta noche y “previsiblemente mañana recibirá el alta”. Afortunadamente, el portero no tuvo ningún problema óseo y todo quedó en un gran susto.
No fue el único expulsado para el conjunto babazorro ya que en el tiempo añadido, 15 minutos, el Alavés perdió a otro jugador por la expulsión, Antonio Blanco.