Obligados a reforzar la plantilla
El Deportivo afronta el mercado de fichajes de invierno con la necesidad de reforzar una plantilla con carencias estructurales y en la que muchos futbolistas no entran en los planes del cuerpo técnico que dirige Cristóbal Parralo. La nómina de jugadores es amplia, pero los Bruno Gama, Saúl García, Gerard Valentín, Pedro Mosquera, Borja Valle o Raúl Albentosa se mantienen en un claro segundo plano y apenas han contribuido.
La portería: el buen nivel de Rubén ofrecido en el Camp Nou ha disipado algunas dudas alrededor de la meta, pero lo cierto es que el Deportivo sigue contando con dos arqueros que no ofrecen garantías (Pantilimon y Tyton) y con otro, el mencionado Rubén, que ha combinado actuaciones notables (Barcelona o Levante) con otras más discretas (Real Madrid o Sevilla).
La defensa: el gran lunar del equipo coruñés. Centrales que atacan mejor que defienden, laterales que sufren en su propio campo... El Dépor ha cometido demasiados errores en la retaguardia, lo que inexorablemente se ha trasladado a los resultados. Sidnei no termina de ofrecer su mejor versión, Juanfran sufre sin la pelota, Schär acumula errores inexplicables y en la banda izquierda el equipo tampoco encuentra el ansiado equilibrio.
El centro del campo: otro de los graves problemas del Deportivo. La falta de consistencia por delante de la defensa, una parcela en la que Guilherme es titular indiscutible, penaliza al cuadro coruñés. Cristóbal ha sacrificado a Valverde y mantiene a Borges en el once titular, pero el equipo no ha logrado proteger debidamente a sus centrales.
La delantera: pese a marcar ante el Celta, la situación de Andone no es la idónea; y el rendimiento de Lucas Pérez dista de ser el que maravilló en A Coruña antes de firmar por el Arsenal. La ausencia de un rematador en el área en un equipo que quiere ser protagonista en campo rival y manejar la posesión cerca de la meta contraria también es significativa.