Nolaskoain no se olvida del paripé de Fuenlabrada: "Fue una auténtica vergüenza"

Aunque en verano volvió a la disciplina del Athletic Club, Peru Nolaskoain guarda un muy buen recuerdo de su cesión al Deportivo la pasada temporada. Y eso que las cosas no salieron, a nivel colectivo, como él esperaba.

En una entrevista concedida a La Opinión de A Coruña, el jugador guipuzcoano ha admitido que es un deportivista más desde la distancia. "Yo veo todos los partidos del Dépor, y los comentamos por un grupo de WhatsApp. Es una pena verlo así y sentirme un poco partícipe de haberlo dejado ahí, nuestro trabajo era mantenerlo en LaLiga SmartBank. Me quedó un poco de daño en el alma, y mal sabor de boca, de irnos así".

Sobre lo que ocurrió en Fuenlabrada, no tiene reparos en admitir que "fue una auténtica vergüenza" y que "si hubiéramos jugado ese partido, creo sinceramente que nos habríamos salvado". "A día de hoy recuerdo aquellos momentos y todavía me entran ganas de llorar por todo lo que pasó, pero tengo la conciencia tranquila de haberlo dado todo", añade.

Nolaskoain reconoce también que sigue en contacto con miembros de la plantilla como Eneko Bóveda y Álex Bergantiños, así como con fisios, médicos y otros trabajadores. Además, le envió un mensaje a Fernando Vázquez tras su destitución: "Me dio mucha pena, hizo un gran trabajo con nosotros y no se merecía ese final".

La lesión que arrastra Nolaskoain

Su compromiso con el equipo deportivista va más allá de las palabras y es que, a día de hoy, todavía arrastra una lesión en el tobillo que se produjo en el último partido ante el Rayo Vallecano y que se le agravó por forzar.

"Me diagnosticaron doble esguince, interno y externo. En el Dépor no estábamos muy bien y había que apretar, pero se me volvió en contra. Iba a salir de titular y a jugar como pudiese en el partido contra el Fuenlabrada. Si me iba a reventar el tobillo, lo iba a reventar, pero no estaba para regalar nada. Le debíamos ese partido a la afición".

Por esta lesión precisamente no pudo jugar después en el partido aplazado, ya que estaba en Lezama recuperándose de la lesión con el beneplácito del club, que le dio permiso para no viajar a A Coruña y recuperarse del tobillo. Y eso que el propio Nolaskoain tenía ganas de viajar y acompañar al grupo.