La locura con Lucas Pérez en A Pobra: el bus encendido y todos esperando a que acabase de firmar autógrafos
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Lucas Pérez es un jugador especial. Ídolo de todo el deportivismo, sobre todo de los más pequeños, siempre tiene tiempo para una foto más, un autógrafo más. Y el jueves, en A Pobra do Caramiñal, no iba a ser menos. Se llenó O Campo da Alta. Al acabar, los más pequeños -y algún mayor- aguardaba por el '7'. Todos querían un recuerdo con él... y Lucas les correspondió. Más de media hora desde que abandonó los vestuarios hasta que consiguió llegar al autobús. En ElDesmarque estuvimos presentes en una tolemia que acabó con trabajadores del club yendo a buscarle, el autobús parado esperando por él y el de Monelos sonriendo a cada pantalla y cada infante que gritaba su nombre.
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El Deportivo de la Coruña levanta pasiones y eso no cambia aunque esté en Primera Federación. Que se lo digan si no a los organizadores del 50 aniversario del Puebla FC, equipo que juega en la localidad de A Pobra do Caramiñal y que este jueves acogió el amistoso entre Dépor y Compostela. 0-2, ganaron los blanquiazules. Y Lucas Pérez, titular y capitán, anotó el primero.
La grada estaba llena. De hecho, se llenó con 45 minutos de antelación. Así que el resto se tuvieron que desperdigar alrededor del campo, con una minigrada improvisada en las pistas de atletismo e incluso muchos sentados sobre el límite del campo y la valla. Pura pretemporada.
Pero el partido pasa a un segundo plano cuando se trata de ídolos. Al acabar, tocaba el momento más importante: las fotos. Salieron de uno en uno los jugadores y los más pequeños iban parando a sus ídolos. Yeremay o David Mella, los canteranos con los que los pequeños más se identifican, tuvieron su minuto de sesión. Pero la locura, como no, la desató Lucas Pérez.
Lucas Pérez, objetivo: llegar al autobús
Eran las 21.50h cuando Lucas Pérez salió del vestuario. Todavía no había hablado Germán Parreño, de los últimos en abandonar la bocana y dirigirse a un banquillo que fue zona mixta improvisada. "Es una afición de otra categoría", explicaba el nuevo cancerbero al tratar de explicar que un jueves a hora y media de la ciudad de Marineda el campo estuviese repleto de camisetas blanquiazules. No importa dónde juegue el Dépor, siempre estará rodeado de su afición.
Los jugadores se fueron todos juntos al autobús. A las afueras del estadio más gente aguardaba a su ídolo. No sabían que Lucas todavía no había podido abandonar el inicio de la entrada a los vestuarios. Casi media hora después y con el autobús encendido, allí seguían todos, esperando por él.
Tal fue la espera que tuvieron que entrar trabajadores del club a buscarle. El bus tiene que volver a casa, pero el '7' tiene otros planes: sacar una sonrisa a cada niño.
Y al final, escoltado, se tuvo que ir. Pero no sin antes hace runa última parada. Eran muchos, no podía detenerse con todos... pero lo hizo cuando vio a un pequeño niño pedir un autógrafo. Y de nuevo avalancha. "Lucas, soy de Monelos", gritaba uno a lo lejos; otro le decía "eres mejor que Haaland"; y todos, en general, pedían un recuerdo con el '7'.
Lucas es lo que todos los aficionados queremos que sea al fútbol y acciones como esta son las que luego generan imágenes como las de cada fin de semana en Riazor. El Deportivo está en la tercera categoría, pero sigue teniendo un ídolo. Y él siempre tiene tiempo para una sonrisa más.