El 'Loco' Abreu, los problemas con Jabo Irureta y su mentalidad al llegar al Dépor: "¿Para qué voy a correr si meto goles?"

Innumerables delanteros han defendido la camiseta del Dépor en su centenaria historia, pero pocos han dejado tanta huella como Sebastián Abreu habiendo estado tan poco tiempo. Y es que el 'Loco' es todo un personaje, que ha dejado innumerables anécdotas y que tuvo una carrera más longeva de lo que nos podríamos imaginar. Algo que se puede explicar gracias a su paso por A Coruña.

Así lo ha explicado él mismo en una extensa entrevista concedida al periodista David Medrano en su Podcast. Para Abreu aterrizar en el fútbol europeo fue todo un golpe de realidad que le sirvió para cambiar de mentalidad.

"Al Dépor llegué en diciembre de 1997. Era el 'Super Dépor', pero estaba peleando por el descenso y lo pudimos salvar y nos clasificamos a la Intertoto. Fue duro en lo futbolístico y en lo profesional, porque en ese momento no estaba preparado para dar el salto al fútbol europeo", asegura el uruguayo.

"Yo seguía con una mentalidad muy sudamericana. Me decía ¿para qué voy a correr si meto goles? Pero en Europa hay que entrenar muy fuerte siempre. Metas goles o no, todos los jugadores son iguales. El fútbol es muy dinámico, los campos están mojados y tenía dificultad para controlar el balón, los controles orientados nunca eran los correctos. Eso me sirvió para entender que, si quería tener una carrera larga y productiva en el fútbol, tenía que darle importancia a los entrenamientos y contratar un nutricionista y un entrenador personal. El fútbol español me demostró cuál es el camino", añade.

Lo que Abreu aprendió de Jabo Irureta y Djalminha en el Dépor

A lo largo de su carrera Abreu ha tenido muchos entrenadores y seguro que se deja influir por muchos en su nueva etapa como técnico. Aunque del que no parece que aplique muchas cosas es de Jabo Irureta.

Y es que el irundarra, verano tras verano, no contaba con el uruguayo y optaba por mandarle cedido. Por eso mismo, no parece que guarde un gran recuerdo de él. "De España volví con un concepto muy malo del entrenador español por mi experiencia con Irureta", asevera.

Si un momento define la carrera de Abreu es el penalti a lo Panenka que marcó en cuartos de final del Mundial de 2010 frente a Ghana. Precisamente un compañero suyo en el Dépor se lo enseñó: "Empecé a picar los penaltis porque coincidí en el Dépor con Djalminha. Me quedé a practicar con él y él me enseñó a cómo pegarle y a cómo engañar al portero", explica.