La mala suerte se ceba con la República Checa y Turquía no perdona (1-2)
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Turquía gana 1-2 para clasificarse a octavos
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República Checa no bajó los brazos a pesar de las complicaciones
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Así hemos contando el Georgia-Portugal de la Eurocopa 2024 (2-0)
República Checa y Turquía se han enfrentado en el último partido de la fase de grupos en un encuentro marcado por el arbitraje. El conjunto otomano llegaba como segunda de grupo y con una victoria amarraban la clasificación a los octavos de esta Eurocopa 2024 que se disputa en Alemania. Por su parte, República Checa llegaba como la tercera clasificada con la necesidad de ganar sí o sí a Turquía para intentar avanzar en el torneo. Finalmente la recompensa se la han llevado los turcos y se enfrentarán en octavos contra Austria después de ganar por 1-2.
Antes de comenzar, lo más comentado ha sido la presencia o no de Arda Güler en el once titular de Turquía. El futbolista del Real Madrid se convirtió en el protagonista en el primer partido de los otomanos en esta Euro con un golazo desde fuera del área contra Georgia, pero el seleccionador, Montella, prefirió dejarle fuera del segundo partido contra Portugal por decisión “médica”. Unas molestias que ha dejado atrás y ha podido regresar al once titular en el partido más importante para lograr la clasificación a los octavos de final.
Una tarjeta roja que condiciona todo el encuentro
Nada más comenzar el partido llegaba la mala noticia para República Checa porque Georgia se acababa de poner por delante de Portugal tras el gol de Kvara. Un resultado que dejaba a los checos sin ninguna posibilidad de clasificarse. Pero las malas noticias no acabaron ahí y en el minuto 20 de partido el colegiado le mostró la segunda tarjeta amarilla a Barák, dejando a Chequia con uno menos para el resto del partido. Una decisión muy rigurosa que condicionó por completo el resto del encuentro. Con esta inferioridad numérica y con el marcador en contra a pesar del empate, los checos se encontraban totalmente contra las cuerdas.
La expulsión la supo aprovechar Turquía que comenzaron a dominar con bastante espacio gracias a la superioridad en el campo. Eso sí, tampoco iba a ser un paseo y no pudieron adelantarse antes del descanso a pesar de tener embotellados a sus rivales. De hecho, llegaron a tener algún susto al final del primer tiempo con una gran ocasión de Jurásek que no consiguió transformar.
Turquía no perdona a República Checa
El segundo tiempo comenzó con dominación turca y, por si los checos no habían tenido mala suerte antes, no tardaría en adelantarse Turquía tras una desafortunada lesión del portero Stanek. El arquero se sacó un paradón de la chistera a Yildiz, pero no pudo hacer nada con el siguiente rechace de Çalhanoglu. Es más, Stanek se lesionó antes de esta segunda acción y, aunque se estira para intentar evitar el segundo disparo, no pudo llegar a tiempo. Un golpe del que no se pudo recuperar y el portero checo tuvo que ser sustituido nada más encajar el gol.
A pesar de los golpes que estaban encajando, lo de República Checa vale para un estudio, porque ni con uno menos ni yendo en contra en el marcador bajaron los brazos y siguieron remando hasta que llegó la recompensa. Soucek pondría picante al final del partido tras un golazo por un potente disparo gracias a un balón que le cae suelto en el área turca. Un gol que daba esperanzas a los checos que con un gol más conseguían clasificarse para los octavos. Aunque la esperanza fue momentánea y ya en el descuento los turcos consiguieron la victoria gracias al último tanto de Cenk Tosun. Un partido cruel para Chequia y sufrido para Turquía a pesar de todo.