Dos lesionados en el West Ham ante el Aston Villa; Yarmolenko acaba entre lágrimas
El Sevilla ha sufrido, un día más, una baja por lesión en el transcurso del partido ante el Rayo Vallecano. Acuña, que había entrado al campo, en la segunda parte, se retiró tras un pìnchazo minutos después e entrar. Pues bien, evidentemente su concurso para el jueves está en tela de juicio a día de hoy. Pero no es el equipo hispalense el único con bajas, pues su rival, el West Ham, también ha tenido contratiempos en el partido de este domingo ante el Aston Villa.
Tanto Michail Antonio, el delantero, como Cresswell, defensa, han caído lesionados en cuestión de minutos en el partido del conjunto londinense ante el Aston Villa de la Premier League. Habrá que esperar a ver el alcance de las lesiones de ambos jugadores, y también evidentemente el alcance del percance de Acuña.
El encuentro entre el West Ham y el Sevilla, de vuelta de octavos de final de la Europa League, se disputará el jueves a las 21.00 horas.
¿Qué es esto? 😰 Michail Antonio y Cresswell, lesionados en cuestión de minutos...
Tres van ya en el West Ham - Aston Villa 😕#PremierLeagueDAZN ⚽ 🏴 pic.twitter.com/rsP7S6hT0n
— DAZN España (@DAZN_ES) March 13, 2022
Yarmolenko rompe a llorar
Precisamente al sustituto de Antonio, el ucraniano Andriy Yarmolenko, delantero del West Ham, se le agolparon las emociones en el estadio de Londres, donde se erigió en protagonista por su participación decisiva en la victoria ante el Aston Villa (2-1) y por la tensión acumulada por la situación de su país por la invasión de Rusia.
El jugador del West Ham apareció en el terreno de juego en los primeros minutos de la segunda parte, en el 52. Sustituyó al jamaicano Michail Antonio.
El duelo estaba atascado para el cuadro de David Moyes, que no encontraba la forma de romper el orden del Aston Villa. El gran momento del ucraniano llegó en el minuto 70, cuando recibió un pase del argelino Said Benrahma y desde el punto de penalti batió al argentino Emiliano Martínez.
Su tanto alivió al equipo londinense. Yarmolenko marcó. No aguantó la emoción. Fue a un lateral del campo y se puso de rodillas, miró al cielo y rompió a llorar. Se cubrió el rostro con las manos mientras gran parte de sus compañeros le abrazaban.
Fue el primer gol del ucraniano en lo que va de temporada. Un gol que celebró de forma especial y con el que encontró desahogo por todo lo que su país vive por la invasión de Rusia. Recibió el jugador el calor de la grada del estadio de Londres y el cariño de sus compañeros.