Xabi Alonso deja el invicto en 51 partidos y da una lección en la derrota: de la doble charla a la medalla

51 partidos. Ahí ha quedado parada al increíble racha del Bayer Leverkusen, un equipo de autor con la batuta de Xabi Alonso que ha caído de la peor manera. En el peor momento, con todo el bloque, en el día de la verdad. Y es que la Atalanta pasó completamente por encima de los alemanes en la final de la Europa League, proclamándose campeón en Dublín con una auténtica exhibición de Ademola Lookman.

Era una sensación de superioridad absoluta la que emanaba el equipo de Xabi Alonso durante toda la temporada. Era un 'triplete' histórico el que oteaba el combinado de las aspirinas, que portó el cartel de favorito en Dublín de manera merecida por su inolvidable año, en el que ganó una Bundesliga -la primera de su historia- para el recuerdo y está clasificado también para la final de Copa.

Xabi Alonso, un señor en la derrota

Pero el cuadro alemán se cayó en Dublín con todo. Alonso no encontró reacción a los dos primeros goles de Lookman, incapaz de acercarse en el marcador en la segunda mitad pese a volcar al campo sobre la portería de Musso. Y el delantero, ya en la segunda mitad, acabó sentenciado el partido.

Una caída dolorosa, la primera del curso, que no cambió el gesto de Xabi Alonso. Un señor en la derrota: consoló a todos sus futbolistas, felicitó a los jugadores de la Atalanta, conversó con Gasperini mientras le hacían pasillo hacia el título y también tuvo una pequeña charla con Aleksander Ceferin mientras le colocaba la medalla. Además, fue uno de los pocos integrantes del Leverkusen, junto a Borja Iglesias, que no se quitó la medalla de subcampeón, que portaba con orgullo.

"Ha sido la primera derrota, algo nuevo para nosotros pero la vida sigue", dijo al canal RTL. una vez concluida la final. "Tenemos la oportunidad de pasar página el sábado en la final de la Copa de Alemania", agregó.

El técnico, además, reconoció que Atalanta había sido mejor y que el Leverkusen no había podido desarrollar su juego acostumbrado. "La actitud de nuestros jugadores fue buena pero la intensidad de Atalanta fue muy grande. Todo el equipo lo dio todo, pero hoy no era nuestra día", sentenció.