El Barça y el Paris Saint-Germain guardan una relación muy tensa desde hace varios años. Concretamente, desde 2017, después de la dolorosa eliminación de los galos en octavos de final de la Champions League. Una remontada histórica en el Camp Nou que muchos califican de ‘robo’, y que enfadó enormemente al jeque. Por esa razón, se vengó meses más tarde.
Primero, impidiendo la salida de Marco Verratti rumbo al club azulgrana, que le había colocado en su agenda de objetivos prioritarios. Y, después, robándoles a una de sus estrellas, Neymar Junior, tras pagar su cláusula de rescisión. Y no acaba allí, porque este julio también se llevaron a una de las grandes promesas de La Masía, Xavi Simons, con la ayuda del polémico agente Mino Raiola.
Capacitado para jugar como mediapunta o interior, destaca por su visión de juego, su clase y su llegada al área. Y ya ha debutado con el primer equipo, siendo titular en un choque de la Ligue 1. El otro nombre propio es el de Edouard Michut, un año menor que su compañero, pues tiene 16 primaveras. Comparado con Verratti, es un mediocentro de gran calidad y con facilidad para recuperar balones.
Dos opciones a tener en cuenta.
Y lo que facilita enormemente pensar que los dos puedan acabar en el Barça es el hecho de que acaban contrato en junio. Y por el momento, ninguno de los dos está cerca de renovar su vínculo.
Veremos.