Bordalás-Setién: una historia de desencuentros
Quique Setién y José Bordalás, dos técnicos antagónicos en el estilo que imponen a sus equipos, volverán a verse las caras el próximo sábado en el Camp Nou con una hemeroteca llena de declaraciones que desvela una rivalidad que con el paso del tiempo se ha ido suavizando hasta una aparente cordialidad.
El FC Barcelona-Getafe CF del fin de semana será el más igualado de todos los que se han disputado en el Camp Nou. El equipo de Bordalás nunca había llegado al campo azulgrana tan arriba en la clasificación. Es tercero después de 23 jornadas y tras su exhibición ante el Valencia (3-0), parece que la candidatura del conjunto azulón a disputar la próxima edición de la Liga de Campeones es seria.
Con una renta de tres puntos sobre el quinto clasificado, el Sevilla, el Getafe necesita réditos en el Camp Nou para mantenerse en la pelea por acabar entre los cuatro primeros clasificados. Para ello, Bordalás tendrá que superar a un equipo cuyo entrenador impone un estilo completamente diferente al del cuadro azulón, marcado por la intensidad, la pelea, la verticalidad, la poca posesión y las transiciones rápidas.
En medio de ese choque de estilos, en el pasado también hubo un enfrentamiento verbal que comenzó en 2013, cuando José Bordalás entrenaba al Alcorcón y Quique Setién al Lugo. El 13 de abril de aquel año, Setién criticó al equipo de Bordalás después de perder 0-1 en el Anxo Carro.
"Nos hemos dejado ganar por un equipo que no se lo ha merecido. Me cabrea ver a los jugadores perder tiempo. De los equipos que están arriba, espero que el Alcorcón no ascienda, porque da pena verlos. Es un rival complicado porque no juega ni deja jugar. Interrumpen y pierden tiempo", dijo Setién aquel día.
Setién dijo del equipo de Bordalás tras caer derrotado con su Lugo: "Espero que el Alcorcón no ascienda, porque da pena verlos"
Año y medio después, el 23 de noviembre de 2014, de nuevo ambos chocaron en un duelo entre el Alcorcón y el Lugo. Setién volvió a criticar al equipo dirigido por Bordalás: "Parece que todos los equipos calentamos el partido contra el Alcorcón y este equipo acaba teniendo líos con todos, no conmigo. Esto ha sido un partido por llamarlo de alguna manera, porque no lo interpreto como tal, lo interpreto como otra cosa. No ha habido continuidad, con cierta asiduidad ha habido interrupciones, líos y para nosotros no es como los que acostumbramos a jugar", dijo.
Bordalás, en esta ocasión, contestó a su homólogo en el banquillo. Dejó clara su postura: "Lo importante es que ha ganado el equipo que más ha querido ganar, el que más ha buscado la victoria y el que le ha echado un par de pelotas. Me parece una falta de respeto gravísima e insto a quién corresponda, Federación, LFP o AFE a tomar cartas en el asunto para cortar estos comentarios", afirmó.
Ya con los dos entrenadores en Primera División, Bordalás en el Getafe y Setién en el Betis, ambos firmaron un 2-2 el 3 de noviembre de 2017 en el estadio Benito Villamarín que volvió a desatar las críticas del preparador cántabro:
Setién, sobre el Getafe de Bordalás: "No se puede permitir que se jueguen sólo 25 minutos en cada tiempo. Esto no es fútbol. Esto es otra cosa"
"Me ha parecido lamentable. El Getafe es el equipo que más faltas hace. Él lo sabe y es lamentable que se hayan dado sólo tres minutos de añadido. Es siempre lo mismo. Estas cosas la tienen que mirar porque la culpa la tienen los árbitros. No se puede permitir que se jueguen sólo 25 minutos en cada tiempo. Esto no es fútbol. Esto es otra cosa. Me hierve la sangre".
Esas declaraciones rompieron el saludo habitual de los entrenadores antes de los partidos. Bordalás, en el choque de vuelta que se disputó en el Coliseum Alfonso Pérez, no se acercó a Setién para estrecharle la mano. Fue la última vez en la que ambos se enzarzaron en una disputa dialéctica.
Después, en cada enfrentamiento que han disputado sus partidos, parece que ha vuelto la cordialidad. O, por lo menos, una tregua impuesta para no encender la mecha. El 28 de octubre de 2018, el Getafe ganó 2-0 al Betis y Bordalás, que tampoco se saludó con el cántabro, volvió a ser preguntado por el estado de sus relaciones con Setién.
"Nunca he hecho ningún comentario al respecto del señor Setién. Sólo he defendido a mi equipo de las críticas. Nosotros no entramos en ese tipo de cosas. No nos hemos saludado porque he salido un poco tarde. No voy a entrar, no tengo nada que comentar. Hay que disfrutar de los momentos buenos del fútbol. Hemos ganado un partido, no hemos hecho nada, pero tenemos unas horas para disfrutar".
En el choque de vuelta, volvió a ganar al Betis, 1-2 en el Villamarín, y echó un capote a Setién tras ser cuestionado por los silbidos que recibió de su afición el ex técnico verdiblanco: "No es agradable y no me gusta. Soy muy respetuoso con todas las aficiones, que son soberanas y la del Betis ha demostrado que es fantástica. Respeto mucho el trabajo de todos los técnicos, el del Betis también. Si está aquí es porque nadie le ha regalado nada".
Después de ese encuentro, Setién aguantó algo más de un mes en el banquillo del Betis. Fue destituido el 19 de mayo de 2019 y desde entonces el camino de ambos entrenadores no han vuelto a cruzarse. Hasta este sábado. De nuevo, volverán a verse las caras. Uno, en el Barcelona, el otro, sigue en el Getafe. Parece que los incendios ya están sofocados, pero aún está pendiente un saludo público que podría volver en el Camp Nou para sellar definitivamente la paz.