Estrada Fernández y el ‘espionaje’ del asistente al vestuario del Barça: “No es normal”
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Reconoce que son situaciones difíciles porque no reconoces a mucha gente
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Considera que habría que preguntar a las partes implicadas
El partido entre Barcelona y Atlético de Madrid todavía sigue a vueltas con la polémica. Y no porque lo que sucedió sobre el césped de Montjuic, sino por lo acontecido en el túnel de vestuarios tras el descanso del partido. Desde el club azulgrana sostienen que uno de los árbitros intentó escuchar las conversaciones del Barça al finalizar el partido.
Estrada opina sobre el posible espionaje
Todo sucedió en el descanso y al final del encuentro. El Barça sostiene que el asistente, Cabañero Martínez, se quedó escuchando en la puerta del vestuario de Xavi, tratando de captar las conversaciones. Es por ello que un miembro del cuerpo técnico le reprochó lo que estaba haciendo. Hay que señalar que el mismo árbitro ya habría estado en el vestuario del Barça previamente durante el descanso.
Estrada Fernández ha valorado este hecho en ElDesmarque de madrugada. E ex árbitro considera que no es una situación de normalidad: "No es normal, salvando que hay pasado algo excepcional. Son situaciones evitables y más cuando se ha terminado el partido y que no hay cámaras", expresó.
En esta línea, hace referencia a su época como árbitro: "Son situaciones complicadas porque hay mucha gente no identificada y es un lío para el árbitro. Sí, me ha pasado que un miembro del cuerpo técnico te haya dicho algo pero entre la multitud de gente no reconoces quien ha podido ser", admitió.
Hay que añadir que dicha circunstancia quedó reflejada en el acta
"Una vez finalizado el partido y en el túnel de vestuario, una persona identificada por el club local como D. Eduard Polo, jefe de prensa del staff técnico, se dirigió al asistente 1, de forma desafiante, en los siguientes términos: "¿Tú qué haces aquí?", sin más incidentes que reseñar", escribió Sánchez Martínez en el acta.
Según ha informado el 'Sport', Cabañero avisó por pinganillo a Sánchez Martínez, quién acudió a la puerta de vestuarios, pidiendo a Polo que se identificara para posteriormente escribir su nombre en el acta arbitral
