El Barcelona sentencia a Vitor Roque: 30 millones, cuatro meses y salida confirmada
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Xavi no cuenta con él para la próxima temporada.
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Suma cuatro partidos seguidos sin jugar.
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Vitor Roque y los números de un fichaje fallido: un problema para Joan Laporta y una postura firme del representante
Vitor Roque está sentenciado. El brasileño no entra en los planes de Xavi Hernández, tal y como ha quedado demostrado en las últimas semanas. Tampoco jugó ante la Real Sociedad, ni siquiera llegó a calentar de hecho, y ya suma cuatro jornadas seguidas sin tener minutos. Su futuro está en el aire y todo apunta a que se marchará del club en verano... apenas cinco meses después de llegar.
Y es que según informa la Cadena Ser, el Barça no cuenta con Vitor Roque para la plantilla de la próxima temporada. Tanto Xavi como Deco han acordado que la mejor opción para el delantero es buscarle una salida el próximo verano. En principio, en forma de cesión, aunque tampoco se descartaría un traspaso en caso de que llegue una propuesta interesante para todas las partes.
Vitor Roque, un pequeño fracaso de sólo cinco meses
Todo esto apenas unos meses después de su llegada a la Ciudad Condal. Roque aterrizó en Barcelona con la máxima ilusión. Todas las imágenes dejaban en evidencia que estaba cumpliendo un sueño. Pero ese sueño no está siendo tal y como esperaba.
El Barça pagó 30 millones de euros fijos por Vitor Roque, en una operación que además incluía otros 30 millones en variables. Un dinero importante, más aún teniendo en cuenta la situación económica del club, sin margen salarial y obligado a recurrir a 'palancas' para ejecutar sus últimas operaciones.
Desde su llegada, el brasileño ha participado en 13 partidos con la camiseta azulgrana en los que sólo ha sumado 310 minutos. Ha marcado dos goles, pero es evidente que su perfil no ha terminado de convencer a Xavi. No ha llegado a debutar en la Champions League, con 0 minutos en las dos eliminatorias, y ha perdido protagonismo en el último mes de forma alarmante: fue titular el 13 de abril ante el Cádiz y, desde entonces, ni un solo minuto.