El hambre de gol del Barça de Hansi Flick: "¡Metemos más que cuatro!"

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El FC Barcelona goleó al Borussia Dortmund
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Pero los de Hansi Flick querían más
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Uno por uno del Barcelona ante el Borussia Dortmund: una delantera sobresaliente logra una gran ventaja para la vuelta
El FC Barcelona no solo dejó una exhibición de fútbol en Montjuic ante el Borussia Dortmund. También dejó una imagen que habla del momento emocional que vive el vestuario. Tras el contundente 4-0 en la ida de los cuartos de final de la Champions League, las cámaras de Movistar+ Liga de Campeones capturaron las palabras en la celebración del cuarto tanto culé. No han tardado en hacerse virales por el ambiente de unión, liderazgo y ambición que se respira en el grupo liderado por Hansi Flick.
En las imágenes se ve a los jugadores abrazándose con gran energía. Robert Lewandowski reparte collejas cariñosas a Gavi entre risas y gritos de celebración, mientras el vestuario entero se funde en un abrazo colectivo.
Pero la escena que más ha llamado la atención la protagoniza Raphinha. El brasileño, que firmó un partido estelar, muestra su faceta de capitán sin brazalete más desconocida. Con tono enérgico, se le escucha gritar: "¡Más, más, más! ¡Metemos más que cuatro!", exigiendo intensidad y dejando claro que el Barça no se conforma.
👊🏼 "¡Más! ¡Más! ¡Más! ¡Metemos más que cuatro!"
Los jugadores del @FCBarcelona_es no querían quitar el pie del acelerador. #LaCasaDelFútbol #UCL pic.twitter.com/mJKkhgKd5K
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) April 9, 2025
Así es el nuevo Barça de Hansi Flick: muy ambicioso
La escena resume a la perfección el cambio de mentalidad que Hansi Flick ha intentado inculcar desde su llegada: un equipo comprometido, con hambre de títulos y consciente de que aún no ha ganado nada. A pesar del resultado, la sensación en el grupo es que hay margen para más y que el verdadero objetivo está todavía por llegar. Mantienen los pies de plomo, conscientes de que deberán jugar en el Signal Iduna Park, aunque llegarán más tranquilos con esta gran ventaja.
Montjuic vivió una noche especial, pero este tipo de celebraciones y palabras ambiciosas sirven para entender que la transformación del Barça no es solo táctica o futbolística: es emocional.
Seis años después de su última semifinal europea, este equipo no solo quiere volver, quiere dejar huella y presentar su firme candidatura a levantar 'la orejona' tras diez temporadas sin hacerlo.
