El FC Barcelona salió derrotado ante el Dortmund, afortunadamente para los intereses azulgranas, sin consecuencias. Los de Hansi Flick consiguieron el billete para las semifinales de la Champions League haciendo valer el abultado resultado del partido de ida. Sin embargo, el vestuario se lo ha tomado como un aviso a navegantes.
Primeros en LALIGA, finalistas de la Copa del Rey y semifinalistas de la Champions League. Nadie puede atreverse a decir que el FC Barcelona está haciendo un temporadón, pero la derrota 3-1 ante el Dortmund trajo fantasmas viejos del pasado.
Según informaba David Ibáñez en ElDesmarque Madrugada, la derrota en Alemania dejó bastante mal cuerpo a los jugadores del FC Barcelona. Hubo enfados, caras largas y autocrítica, entendiendo la derrota como un aviso para no confiarse. Un aviso que ya el propio Joan Laporta había dado de forma pública antes del partido.
Tanto Dubarsí, como Gavi, De Jong y especialmente Koundé insistieron en que no pueden volver a permitirse una derrota como la de Dortmund. "Es una decepción, no hemos estado a la altura, ni al nivel", comentaba Koundé ante los medios. "Todo campeón de la Champions tiene una derrota, y esta ha sido sin consecuencias. Cualquier aficionado del FC Barcelona habría firmado el verano pasado estar así en esta altura de la temporada. Es un toque de atención y sin consecuencias", comentaba Matías Prats en su intervención en el programa. "En Champions cualquier equipo te pinta la cara y esto es un aviso para lo que viene", apuntaba Tote en el programa.
La rueda de partidos no para para un FC Barcelona que se medirá el próximo sábado ante el Celta de Vigo en LALIGA para intentar mantener la distancia de cuatro puntos que mantiene sobre el Real Madrid.
Panda niñatos, ya se creen lo que no son, únicos en el universo, empiezan mal, cuando todavía no han ganado nada,