De futbolistas a representantes: Carlota Planas y Judith Fernández, 'rara avis' en el fútbol femenino

Carlota Planas (nacida en Barcelona en 1992) y Judith Fernández (nacida en Barcelona en 1996) son dos destacadas representantes de futbolistas femeninas en España. A pesar de que se trata de un campo aún inexplorado y en el que hay muy pocas profesionales, su trabajo se encuentra en auge gracias al crecimiento exponencial que ha experimentado el fútbol femenino en nuestro país.

Planas está al frente de Unik Sport Management; Fernández trabaja para Interstar Deportes junto con Amparo Forés. Son mujeres de fútbol en un universo eminentemente masculino; un entorno pequeño en el, que entre otras, Willy Romero y Marta Díaz se abren paso en Bplayer o Anna Orobitg en Tàcticgrup.

"Somos unas 'rara avis'. Es importante que cada vez haya más mujeres representando a mujeres deportistas, por el vínculo existente, por el 'feeling' que se crea. Al final, las necesidades que se generan son diferentes a las de los chicos", dice Fernández a EFE.

"Hace seis años no era diferencial tener un agente en el fútbol femenino. Ahora sí, y no solo por un tema económico, también por el posicionamiento de la jugadora", explica Planas a EFE. Fernández cree que las futbolistas son "cada vez más conscientes" del cambio de paradigma, especialmente las que llevan más tiempo en el fútbol femenino.

Así funciona una agencia de representantes dentro del fútbol femenino

"Las más jóvenes son menos conscientes, porque ya han crecido con más recursos", afirma la agente de Interstar Deportes. Aunque Planas cree que "el 95% de las jugadoras de Primera División tienen representantes", Fernández lo rebaja y considera que el porcentaje se sitúa en torno al 70. ¿Por qué motivo? "Todo tiene que ver con las cantidades que cobran, muchas de ellas difícilmente pasan de los 25.000 euros anuales; un 60 por ciento están entre 25.000 y 30.000 y creen que no necesitan estos servicios", asegura Fernández.

La primera representada de Planas fue Claudia Pina. Ahora cuenta en su cartera con las también barcelonistas Patri Guijarro, Cata Coll y Mariona Caldentey; a las atléticas Lola Gallardo y Estefanía Banini, así como a jugadoras del Valencia, el Sevilla o el Madrid CFF. Marta Turmo fue la primera a la que representó Judith Fernández, que empezó en el negocio en 2020 en Podium Trade, una empresa de representación de Bilbao. En 2022 pasó a Interstar Deportes, con sede en Valencia.

"El negocio ha cambiado mucho con la entrada de patrocinadores y la televisión. Antes los sueldos eran irrisorios, queda mucho camino por recorrer. Es difícil ser profesional cobrando 16.000 euros por temporada, pero las jóvenes son cada vez mejores, con más físico, más técnica... En cinco años, la mejora será exponencial", apunta Fernández.

Planas admite que antes "costaba mucho" que apostaran por las jugadoras. "Era más un acto de responsabilidad social, ahora hablamos de negocio, de cifras, ahora hasta te vienen a buscar, algo que era muy extraño hace solo un par de años", insistió.

La Liga F debe mejorar en muchos aspectos y fijarse en la Premier femenina

Ambas coinciden en que el producto de la Liga F "se podría vender mejor" y que el espejo en que tendría que mirarse es la Superliga femenina inglesa. "No ayudan los terrenos de juego de hierba artificial, los errores arbitrales o las malas retransmisiones televisivas", destaca Planas. Fernández habla del enorme trabajo de la Premier femenina con los clubes y que se reflejó en la Eurocopa que organizaron el verano pasado con el éxito de la selección inglesa, algo en lo que se debería fijar la Federación Española.

"En la Premier cada vez hay más demanda de jugadoras españolas, que están haciendo las cosas muy bien con sus clubes y en la selección, que es un gran escaparate. Son profesionales y valoran estas cosas. Además, los salarios no son comparables", insiste Fernández. "En Inglaterra se hacen las cosas de otra manera, es la mejor liga del mundo, a pesar de tener menos talentos que en la española", asegura Planas y coincide en ello Fernández.

"La Premier se podría llevar a las jugadoras españolas que quisieran, por el modelo de negocio que tienen. La Liga F es de las mejores, tiene clubes como el Barça y el Real Madrid, pero en Inglaterra pueden realizar grandes ofertas a las jugadoras. Ahora mismo pueden pagar, en un buen contrato, hasta cinco veces más que aquí", informa Fernández. Y es que en España, el salario mínimo está regulado (16.000 anuales), pero se juega con muchos conceptos, por ejemplo con los contratos parciales.

16.000 es el salario para una jornada completa; pero algunos clubes pagan por el 75% (12.000), sin que haya diferencias en la preparación, porque las jugadoras se entrenan y viajan en las mismas condiciones.

Todos los elementos en juego esperan que se regule todo en un nuevo convenio, que tenía que haberse cerrado el año pasado (2022), pero que aun no se ha hecho. Difícilmente se puede pedir profesionalización con un sueldo de 12.000 euros, si es el por el 75%, con una retención del 15%, porque al final el salario mensual apenas supera los 800 euros mensuales netos. Para una jornada completa, el salario es de 1.050.

Así que todo pasa por profesionalizar más el producto. "No solo las jugadoras, sino también las entrenadoras, las árbitras. En la Premier, por ejemplo, los partidos son en abierto, aquí DAZN los da de pago porque ha abonado 8 millones por los derechos", recuerda Fernández.

"Muchas agencias no van a poder resistir, sobre todo si tienes una filosofía de acompañamiento", insisten ambas, que ya preparan la nueva temporada, los próximos movimientos del mercado, sin tantos altavoces como en el fútbol masculino.