Segundas partes sí que fueron buenas
El Levante UD le da la vuelta al dicho popular y deja claro que las segundas partes sí que fueron buenas. El conjunto de Paco López ha sabido aprovechar los tiempos de descuento para reactivarse, dejando su mejor fútbol para el último tramo de partido. De hecho, todos los goles anotados por los de Orriols esta temporada han sucedido después del paso por vestuarios.
Durante le primer partido de la temporada, el Levante no fue capaz de encontrar portería, y no fue porque no lo intentase. Los valencianos se lanzaron al ataque en la segunda mitad tras los cambios, que supusieron la entrada de Roger, Morales y Rochina. Aunque la portería se quedó a cero, los azulgranas dejaron su mejor juego en el último tramo del encuentro.
En la segunda jornada las cosas salieron mejor para los de Orriols. Empezaron perdiendo el encuentro de manera muy temprana tras un gol de Gerard que adelantaba al Villarreal en el marcador. Sin embargo, Aitor mantuvo al equipo con esperanzas, hasta que en la segunda parte se dio la remontada. Llegaban los primeros goles de la campaña, ambos de penalti y de Roger, que entró de nuevo para revolucionar el partido.
Ya en el tercer partido del curso, de nuevo en el Ciutat de València, el Levante volvía a imponerse en el luminoso gracias a goles anotados en los últimos diez minutos del encuentro. En esta ocasión, los encargados de anotar fueron Sergio León y Morales, este último ya en tiempo de descuento.
En la última jornada, frente al Real Madrid en el Santiago Bernabéu, el Levante desplegó todo su juego en la segunda mitad. Con una primera parte en que los granotas apenas pudieron pelear quince minutos, y en la que se marcharon al descanso con un 3-0 en contra, los de Paco López tuvieron que darle la vuelta al encuentro. Fue Mayoral quién acortó distancias con un gol tempranero, seguido de otro de Melero a falta de un cuarto de hora para el final. Eso, sumado a las paradas de Aitor y los constantes ataques azulgranas, hicieron que el conjunto blanco terminase pidiendo la hora.
Con esto, los de Orriols se han consolidado como un equipo de segundas partes, capaces de lograr remontadas en pocos minutos e, incluso, poner apuros a uno de los grandes de LaLiga.